Salvada por el avemaría de un corredor

Domingo 21 de enero de 2024

Mi historia favorita de 2023 fue “El asombroso poder de un Ave María”, ya que se centraba en cómo una sola oración que no debemos dar por sentada puede cambiar incluso las vidas de extraños. En un momento, John Petrovich pasaba corriendo por delante de una casa y vio una ambulancia en el camino de entrada.

Desde niño había aprendido a rezar por los necesitados cada vez que veía o escuchaba una ambulancia o una sirena de policía. Se persignó y esta vez rezó un Ave María por la persona que estaba dentro.

La semana siguiente, mientras corría por la misma calle, una mujer lo detuvo. “Me salvaste la vida”, le dijo. Ella describió cómo se había desmayado y se estaba muriendo.

Al recuperar la conciencia en el hospital, tuvo una visión de Jesús, quien le dijo: “Todo va a estar bien; vas a estar bien porque esta persona oró por ti”. Le dijo a Petrovich que “en la palma de su mano estaba tu cara. Y tengo que agradecerte por salvarme la vida”. Se quedó sin palabras.

Este incidente es un ejemplo perfecto de cómo la oración ferviente puede “mover montañas”, como dijo Jesús en el Evangelio. Si un Ave María tiene ese poder, imagina el poder en las 50 Avemarías de un Rosario. El hombre devoto dijo al Register que está aprendiendo a poner “más énfasis en por qué deberíamos orar unos por otros… por otras personas en sus necesidades y deseos antes que nosotros”.