La amistad con Tin tan lo llevó al cine

Viernes 5 de abril de 2024

Wolf Ruvinski Manevics, nacido en Latvia, el 30 de octubre de 1921 y fallecido en la Ciudad de México, el 9 de noviembre de 1999, fue un actor y luchador profesional mexicano de origen letón.

En 1946, llegó a México; quería pasar a Estados Unidos, pero por falta de papeles y recursos tuvo que quedarse en la Ciudad de México, en donde trabajó como cargador de bultos en el mercado de La Merced.

Un día, en un pleito callejero, le rompieron la nariz, y lo llevaron al consultorio del Dr. Bolaños, quien se ocupaba a la sazón de los luchadores, y lo metió a aprender lucha grecorromana, y después le ayudó a volverse luchador profesional.

Ruvinski debutó en la mítica Arena Coliseo el 28 de junio de 1946, enfrentando a Bobby Bonales.

Cada que iba a luchar, bajaba de peso involuntariamente, esto por miedo a subirse al ring, sin embargo superó su miedo.

Su primera intervención en Cine Mexicano mexicano fue en la cinta No me defiendas, compadre (1949), un trabajo que marcó la relación profesional y amistosa entre el protagonista Germán Valdés Tin Tan y Ruvinski.

Gracias a la invitación del pachuco de oro, este se volvió comparsa habitual en varias de las mejores películas del cómico, como Simbad el mareado (1950), El revoltoso (1951), Las locuras de Tin Tan (1952), El bello durmiente (1952), Me traes de un ala (1953), El vagabundo (1953), El sultán descalzo (1956), El gato sin botas (1957) y Tres mosqueteros y medio (1957); su última colaboración con el cómico fue al año siguiente, justo cuando este iniciaba su etapa de decadencia.

Trabajó al lado de grandes personalidades del cine de oro, por ejemplo también compartió créditos junto a Mario Moreno «Cantinflas».

También participó al lado del Ídolo de México, en su papel característico de Villano, en la emblemática cinta «Pepe el Toro», personificando a un boxeador.