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Alfredo Zitarrosa, el Cantor de Uruguay

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Miércoles 17 de enero de 2024

Se han cumplido 34 años de la muerte de Alfredo Zitarrosa…

Registrado como Alfredo Iribarne (su verdadero nombre), fue un poeta, escritor y periodista uruguayo, considerado una de las figuras más destacadas de la música popular de su país y América Latina.

Fue hijo natural de Jesusa Blanca Nieve Iribarne, que con 19 años lo dio a luz en el hospital pediátrico Pereira Rossell.

A poco de nacer, en circunstancias especiales, su madre lo dio a criar al matrimonio compuesto por Carlos Durán, hombre de varios oficios, y Doraisella Carbajal, empleada en el Consejo del Niño.

Pasó entonces a ser Alfredo «Pocho» Durán. Con esa pareja vivió en diversos barrios de la capital uruguaya y luego, entre 1944 y fines de 1947, se trasladó al pueblo de Santiago Vázquez, con frecuentes visitas a la campaña cerca de Trinidad, capital del departamento de Flores, de donde era oriunda su madre adoptiva.

Se ha señalado que esta experiencia infantil lo marcó para siempre, dado que en su repertorio resalta la inclusión mayoritaria de ritmos y canciones de origen campesino, fundamentalmente milongas.

Regresó con su familia adoptiva por breve tiempo a Montevideo, para luego, al comienzo de su adolescencia, pasar a vivir con su madre biológica y el esposo, el argentino Alfredo Nicolás Zitarrosa, quien le dio su apellido y su hermana recién nacida, en el Rincón de la Bolsa, hoy llamado Ciudad del Plata, en el km 29.5 de la vieja ruta a Colonia, departamento de San José.

Afincado allí, cursaba el liceo en Montevideo, adonde finalmente se trasladó en su temprana juventud.

Vivió primero con el matrimonio Durán y luego en la pensión de la señora Ema, sita en la calle Colonia esquina Médanos (hoy Barrios Amorín), para ocupar después la famosa buhardilla de la casa que funcionaba también como pensión y era propiedad de Blanca Iribarne, su madre, ubicada en la calle Yaguarón (hoy Aquiles Lanza) 1021, enfrente de la plaza que actualmente lleva su nombre y a la vista del Cementerio Central.

Trabajó, entre otros menesteres, como vendedor de muebles, de suscripciones a una sociedad médica, de oficinista y en una imprenta.

Tiempo después recordaría con especial afecto al que fuera su primer empleador, un tal Pachelo, que le fue presentado por uno de sus compañeros habituales de viaje en sus traslados diarios a Montevideo, durante la época liceal.

Nace el Cantor

Se inició en las lides artísticas en 1954, como locutor de radio. Incursionó como presentador y animador, libretista e informativista, e incluso como actor de teatro.

Fue también escritor, poeta y periodista. En esta última actividad, se destacó su labor en el semanario Marcha.

Aunque cantaba desde pequeño y había realizado ya algunas grabaciones informales que trascendieron con los años, debutó profesionalmente como cantor el 20 de febrero de 1964, en Perú.

Forzado por las circunstancias y un poco fortuitamente, participó en un programa que se emitía por el Canal 13, Panamericana de Televisión, comenzando así una carrera que nunca se interrumpiría. Zitarrosa relató así su experiencia:

No tenía ni un peso, pero sí muchos amigos. Uno de ellos, César Durand, regenteaba una agencia de publicidad y por sorpresa me incluyó en un programa de televisión, y me obligó a cantar. Canté dos temas y cobré 50 dólares. Fue una sorpresa para mí, que me permitió reunir algunos pesos.

Poco después, al pasar por Bolivia de regreso a Uruguay, realizó varios programas en Radio Altiplano de la ciudad de La Paz.

Debutó posteriormente en Montevideo, en 1965, en el Auditorio del SODRE (Servicio Oficial de Difusión Radioeléctrica).

Su participación en este espacio le sirvió de peldaño para ser invitado, a principios de 1966, al ya reconocido Festival de Cosquín, en Argentina, al que volvió en 1985.

Desde el principio, se estableció como una de las grandes voces del canto popular latinoamericano, con raigambre folclórica y clara ideología de izquierda.

Cultivaba un estilo contenido y varonil, y su voz grave y un típico acompañamiento de guitarras le dieron su sello característico.

La militancia política

En la década de 1960 fue votante y militante del Frente de Izquierda de Liberación (FIDEL), lista 1001, en el seno del Movimiento Popular Unitario que integraba aquella coalición.

Luego siguió militando en el Partido Comunista de Uruguay hasta su muerte. En 1971 se adhirió al Frente Amplio.

Participó como cantor en innumerables actos políticos de estas organizaciones.

El exilio

Aquellas actividades, sumadas al contenido ideológico de su canción, le valieron el ostracismo y finalmente el exilio, durante los años de la dictadura (1973-1985).

Sus canciones estuvieron prohibidas en Uruguay durante ese período, y más tarde en Argentina y Chile, por las dictaduras golpistas y genocidas que gobernaron esos países.

Vivió entonces, sucesivamente, en Argentina, EspañaMéxico y, nuevamente, Argentina, a partir del 9 de febrero de 1976.​

En su primera etapa argentina, que terminó el 29 de septiembre de 1976, vivió en Buenos Aires.

Allí tuvo una buena actividad artística, que incluyó una presentación en San Pablo, Brasil. Había conformado dos elencos de guitarristas argentinos y uruguayos, con los que realizó diversas grabaciones y presentaciones en varias ciudades del país, entre ellas la propia Buenos Aires y Bahía Blanca.

No obstante, esas producciones solo incluyeron temas compuestos previamente.

Presionado por la persecución que sobrevino tras la irrupción de las dictaduras que, simultáneamente, asolaban el continente coordinadas a través del Plan Cóndor, partió hacia la ciudad de Madrid, España, donde llegó el 30 de septiembre.

Vivió allí el peor momento de su exilio, hasta que, el 19 de abril de 1979, se trasladó definitivamente a México, donde venía realizando distintas presentaciones de la mano del productor Julio Solórzano Foppa, desde 1977.

Se afincó en el Distrito Federal y, a pesar de que todavía seguía sin poder crear nuevas canciones, tuvo un importante desempeño, incluyendo un programa semanal en radio Educación y múltiples presentaciones en diversos escenarios, como el Auditorio Nacional.

Durante ese período, que llegó hasta junio de 1983, realizó, también, actuaciones en otros países: Cuba, Venezuela, Perú, Australia y Estados Unidos, entre otros.

El regreso

Levantada la prohibición de su música, como la de tantos en la Argentina luego de la Guerra de Malvinas, se radicó nuevamente en Buenos Aires, donde realizó tres memorables recitales en el estadio Obras Sanitarias, los primeros días del mes de julio de 1983.

Casi un año después volvió a su país, donde tuvo una histórica y masiva recepción el 31 de marzo de 1984, la que fue descrita por él mismo como «la experiencia más importante de mi vida».​

En ese regreso, pasadas las primeras emociones del reencuentro con su país y su gente, comenzó a tener diversas dificultades.

Muerte

Falleció en los albores del 17 de enero de 1989, a causa de una peritonitis derivada de un infarto mesentérico.​

Estilo musical

Zitarrosa buscó una canción uruguaya basada en los géneros musicales que identifican a la región.

En esta búsqueda también puede identificarse a artistas contemporáneos como Daniel Viglietti y Los Olimareños, que a su vez fueron precedidos por otros como Osiris Rodríguez CastillosAmalia de la Vega y Anselmo Grau.​

Su obra tiene base en la música folclórica rural, y encuentra en el tango el modelo de acompañamiento de guitarras.

Zitarrosa rescató los dúos, tríos y cuartetos presentes desde larga data en la música uruguaya.

Utilizó el cuarteto principalmente en la milonga. Esta formación ya había sido utilizada en el tango, donde artistas como Carlos Gardel o Alberto Mastra usaron tres guitarras y un contrabajo o tres guitarras y un guitarrón.​

Obra

Entre las canciones que se convirtieron en grandes éxitos figuran «Doña Soledad», «Pa’l que se va», «Crece desde el pie», «Recordándote», «Stéfanie», «Adagio en mi país», «Zamba por vos», «El violín de Becho» y el poema por milonga «Guitarra negra».

Como poeta, fue galardonado por la Intendencia de Montevideo con el Premio Municipal de Poesía de 1959, por el libro Explicaciones, que nunca quiso publicar.

En 1988 vio la luz su libro de cuentos Por si el recuerdo, con relatos escritos en distintos momentos de su vida.

Su vida en sus creaciones

Como todo creador, Alfredo Zitarrosa nutrió su obra de fuentes diversas. Aun así, en su caso particular es de destacar el alto componente autobiográfico, o la exposición de vivencias personales, que aparecen en sus creaciones.

El tema «Pájaro rival» refleja una honda preocupación existencial y hasta tiene una intuición premonitoria de su muerte próxima, ocurrida poco después de finalizar la grabación del disco donde está incluido, Sobre pájaros y almas, editado póstumamente en 1989:

Por sanar de una herida
he gastado mi vida
pero igual la viví
y he llegado hasta aquí.
Por morir, por vivir,
porque la muerte es más fuerte que yo
canté y viví en cada copla
sangrada querida cantada
nacida y me fui…

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