Joaquín Pardavé y su faceta poco conocida como compositor
Lunes 2 de octubre de 2023
Investigaciones recientes indican que fue autor de más de 70 canciones, comparte Pável Granados, coordinador del catálogo de Música Popular Mexicana de la Fonoteca Nacional
Conocido sobre todo como actor y recordado gracias a entrañables personajes del cine como Susanito Peñafiel o el Baisano Jalil, Joaquín Pardavé fue también un compositor de algunos éxitos del cancionero popular.
Él escribió la famosa Negra consentida, de la cual se tiene registro de alrededor de 70 versiones grabadas en diversas partes del mundo.
Investigaciones recientes indican que fue autor de más de 70 canciones, comparte Pável Granados, coordinador del catálogo de Música Popular Mexicana de la Fonoteca Nacional.
Según Granados, la Fonoteca Nacional tiene algunas joyas del compositor, como el corrido que dedicó a su natal Pénjamo y que en 1983 grabó Astrid Hadad, admiradora de la obra de Pardavé, o Por fin cuándo, que Guty Cárdenas grabó en Nueva York y el foxtrot Bésame en la boca, que grabó Emilio Tuero.
En la radio
Participó en varios programas de la XEB, al lado de figuras como Pedro Infante.
El estilo de composición de Joaquín Pardavé tiene dos vertientes, explica el investigador.
«Él fue actor de teatro de revista, era muy chistoso y muy celebrado, nació de familia de actores y sabía de la música que gustaba, porque antes de la radio, el lugar natural de difusión era el teatro.
En su obra, por un lado está la música campirana inspirada en Guty Cárdenas, una música melancólica, a veces chistosa, como en la canción Ventanita morada, pero sobre todo añorando la provincia, con letras melancólicas como Florecita de retama y Varita de nardo, que eran muy famosas.
Y por otra parte la influencia de Agustín Lara, a quien le tocó ver en el teatro a finales de los años 20. Inspirado en él compuso Cholita, que es un bolero que dedicó a su esposa, y después Negra consentida, que es su bolero internacional», señala.
Protagonista de sus canciones, la mujer también era descrita por Joaquín Pardavé en dos sentidos: Señalándola con desprecio o encumbrándola como compañera fiel.
«Hizo boleros como Falsa y No hagas llorar a esa mujer, que son de despecho contra las mujeres, pero dedicadas a su mamá porque lo abandonó.
Sus canciones son al mismo tiempo románticas, de buscar una mujer ideal, bonita, hogareña, que no trabaje, y por otro lado contra las que salen a trabajar, olvidan a sus hijos y causan males.
En Falsa dice: ‘pecho de mujer, nido de hiena’; son más o menos así, de una dualidad interesante porque así era Agustín Lara, pensaba que las mujeres eran al mismo tiempo buenas y malas, decía que saber amar era también odiar un poco», agrega Granados.
Pardavé, a pesar de los años, sigue vigente como actor y compositor y por eso permanece en la preferencia y recuerdo del público mexicano.