La gran victoria Cristera: la batalla de Tepatitlan
Lunes 20 de marzo de 2023
En el marco de la llamada Guerra Cristera, Cristiada o rebelión de los Cristeros, el 17 de marzo de 1929 se llevó a cabo la batalla de Tepatitlan, Jalisco, Mexico, donde se enfrentó el ejército federal mexicano comandado por el general Pablo Rodriguez y el encargado de reprimir la rebelión el general Saturnino Cedillo, con las tropas del ejército Cristero a la cabeza del general y sacerdote José Reyes Vega.
Las fuerzas en pugna estaban integradas por 4000 Cristeros y 500 federales y 4 000 agraristas traídos de San Luis Potosí, Zacatecas y Guanajuato, Mexico.
Hacia las 4 de la mañana las fuerzas federales mexicanas entraron a lo que hoy se conoce como «Españita», donde se detuvieron para hacer la exploración a la ciudad que dormía tranquilamente y estudiar la estrategia a seguir en caso de batalla, hasta que se dio la orden de entrar a la ciudad de Tepatitlán.
La batalla se libró dentro de la ciudad en donde desde las azoteas de las casas, la presidencia municipal, las parroquias y algunos templos, los cristeros esperaban a sus adversarios y abrieron fuego contra los federales, que no encontraron lugar donde esconderse.
No hay un registro oficial de bajas, pero se supone un número mayor a los 100 hombres.
La controversia está en que según una versión mencionada por el historiador franco-mexicano Jean Meyer, las bajas cristeras fueron 25 y los muertos federales eran alrededor de 120, pero de acuerdo con datos del historiador y cronologista Francisco Gallegos, así como testimonios de personas de la ciudad de Tepatitlan, así como antiguos cristeros que participaron en el combate, mencionan que las bajas federales fueron 3000 y los cristeros tuvieron 50.
A pesar de la victoria significativa, el movimiento rebelde perdió a uno de sus más grandes generales, pues el padre Reyes Vega murió al terminar la batalla, sea por una bala perdida o por un disparo a traición.
El cura guerrero murió fulminado por un disparo que le perforó le cabeza de atrás hacia delante, significando una pérdida sensible para los alzados.
Dios, Patria y Libertad
