El día de la Candelaria
Jueves 2 de febrero de 2023
Una de las fiestas más antiguas de la Iglesia Católica.
LA CANDELA DE LA VIRGEN MARÍA
El nombre a la Virgen de la Candelaria, deriva etimológicamente de candelero o candela que se refiere a la luz: la luz santa que guía hacia el buen camino y la redención y aviva la fe en Dios.
La Fiesta de la Candelaria se conoce y se celebra con diversos nombres: la Presentación del Señor, la Purificación de María, la fiesta de la Luz y la fiesta de las Candelas; donde todos estos nombres expresan el significado de la fiesta.
Cristo, es la Luz del mundo que fue presentado por su Madre en el Templo, quien viene a iluminar a todos como la vela o las candelas, de donde se deriva esta advocación de la Virgen de la «Candelaria».
Se celebra el 2 de febrero (40 días a partir de Navidad) y se ha asociado con la costumbre de bendecir las velas utilizadas dentro y fuera de la liturgia desde el siglo X.
Es la fiesta del Señor, pero tiene muchos acentos marianos, porque es María quien tiene una gran contribución a la obra de la Redención. Trae al niño, lo ofrece al Padre Celestial y escucha las palabras proféticas del anciano Simeón.
A la Candelaria se le conoce como la Virgen negra (de piel oscura), lo que resalta el sincretismo derivado de la imagen original que fue encontrada a la orilla del mar en Tenerife, entre los siglos XIV y XV, por dos pastores guanches, uno de los pueblos aborígenes de las Islas Canarias españolas, entroncados genética y culturalmente con los bereberes del norte de África.
Desde las Islas Canarias el culto a la Virgen de la Candelaria se ha extendido a través de los siglos por diferentes ciudades y países sobre todo en Latinoamérica, donde ha adoptado rasgos de las diferentes naciones donde se encuentra un templo suyo.
La iconografía de la Virgen de la Candelaria se basa en el pasaje bíblico de la Presentación del niño Jesús en el Templo de Jerusalén (Lucas 2,22-40). La Virgen sostiene la candela o vela de la que toma nombre y es representada llevando al Niño Jesús, una canasta con un par de tórtolas, resguardada por lobos, etc.
¿Por qué en México comemos tamales el Día de la Candelaria?
Por la misma razón que los bereberes africanos veneraron a la Candelaria, siendo que en México se desbordó el sincretismo del mestizaje en esta expresión humana de la gastronomía, como en muchas otras similares que conocemos en toda Latinoamérica.
El 2 de febrero, es el día en que según la tradición se “levanta” al Niño Dios del pesebre para “vestirlo” (presentarlo en el Templo) y continuar con la ruta católica que pasa por los Carnavales que se festejarán en marzo, la Cuaresma y el Miércoles de Ceniza, hasta terminar con la Semana Santa.
Comer tamales en esta fecha es un capricho gastronómico. Similar a casi todas las fiestas mexicanas (y de la Iberosfera), La Candelaria es una mezcla de tradiciones prehispánicas y católicas.
Así como se festeja la presentación de Jesús al Templo de Jerusalén, nuestros antepasados conmemoraban el primer día del año azteca en honor a Tláloc, Chalchiuhtlicue y Quetzalcóatl.
Los tamales siempre estuvieron presentes en las ofrendas a los dioses, sobre todo porque están hechos de maíz, el material que los dioses utilizaron para crear al hombre. ¿Recuerdas la leyenda del Popol Vuh, el libro sagrado de los mayas? Bueno, pues éste cuenta que después de varios intentos fracasados por parte de los númenes por crear al hombre con distintos materiales, fue el maíz el que finalmente les permitió darle vida.
!Si te tocó el muñeco, te toca dar los tamales!
Muchas felicidades a todas las Candelarias.