El nuevo portaaviones de la India, el INS Vikrant, listo para frenar la expansión china en el Indo-Pacífico
El buque, de fabricación local, desplaza 44.000 toneladas y entrará en servicio en agosto, cuando el país celebra el 75 aniversario de su independencia
India ha entrado en el selecto club de naciones con capacidad para construir portaaviones, en el que están China, Rusia, Estados Unidos, Francia y Reino Unido. En apenas unos días entrará en servicio el INS Vikrant (en hindi, “valiente”), el flamante portaaviones con el que India quiere dar un salto adelante en su potencia naval, sobre todo después de que China, su eterno rival regional, haya botado su tercer portaaviones, el Fujian.
El INS Vikrant –símbolo de orgullo para Nueva Delhi– tendrá una velocidad máxima de alrededor de 28 nudos y una velocidad de crucero de 18 nudos con una autonomía de unas 7.500 millas náuticas. La Armada de India cuenta con unos 130 barcos. Sus esfuerzos por modernizarse en los últimos años y competir con China culminarán con la inminente entrega del INS Vikrant.
India y China comparten una frontera de 3.500 kilómetros y ambas poseen la bombas nucleares. En 1962 libraron una guerra corta que ganó Pekín. Desde entonces, los roces fronterizos no han desaparecido. En 2020, la tensión se disparó tras varias escaramuzas cuando militares de ambos países se enfrentaron en una batalla medieval en el valle de Galwan, con el resultado de veinte soldados indios muertos a manos de las tropas chinas. El nuevo portaaviones pretende ser un impulso de la Armada india en plena expansión del gigante asiático.
El INS Vikrant -cuyos trabajos de diseño y construcción se han desarrollado durante casi dos décadas- dista del buque inaugurado por Pekín hace apenas un mes. Mientras el Fujian desplaza 80.000 toneladas, el buque indio mueve “tan solo” 44.000 toneladas. Eso sí, es el buque de guerra más grande y complejo jamás diseñado y construido en la India.
El Vikrant -con un coste de 3.000 millones de dólares- ya se ha integrado a los principales equipos y sistemas navales indios así como a la flota aérea. De hecho, la Armada del país ha publicado fotografías en las que aparece una réplica de un avión de combate MiG-29K y un helicóptero Kamov Ka-31 estacionados en la cubierta de vuelo y que han servido a la tripulación como entrenamiento.
El INS Vikrant tiene 262 metros de eslora con una manga de 62 metros y una altura de 59 metros. Además, distribuye 14 cubiertas, cinco en la superestructura, y 2.300 compartimentos. En total, tiene capacidad para acoger una tripulación de 1.700 personas. Las dimensiones del portaaviones chino Fujian son mayores ya que tiene 320 metros de eslora y 73 metros de manga.
Basado en la tecnología de rampa de salto de esquí, Vikrant puede operar aeronaves de despegue corto pero aterrizaje arrestado (STOBAR) con dos pistas de despegue y una pista de aterrizaje con tres cables de detención. En un principio operará 24 aviones de combate MiG-29K de fabricación rusa, pero la Marina india está en proceso de compra de una flota de aviones del estadounidense F/A-18E Super Hornet de Boeing y del francés Rafale-M, de Dassault Aviation.
Otra diferencia sustancial es que el INS Vikrant cuenta con rampa de esquí para el lanzamiento de aviones, mientras que el Fujian emplea el Sistema de lanzamiento de aeronaves electromagnéticas (EMALS), que puede lanzar aviones más pesados en menos tiempo.
Según las autoridades del país, el Vikrant ha sido construido al 75% con materiales y sistemas de origen indio, incluido el acero, del que India es uno de los líderes mundiales en producción, en los astilleros Cochin Shipyard Limited (CSL).
La quilla del INS Vikrant se colocó en 2009 y salió flotando del dique seco en 2011. Tardo dos años en botarse, en 2013. Desde entonces se ha seguido trabajando en el equipamiento del buque y en su integración. Con el aprendizaje adquirido, el astillero asegura que ahora podrá fabricar otros portaaviones de 45.000 toneladas en cinco año e incluso introducir el sistema de lanzamiento de aeronaves electromagnéticas (EMALS), el mismo que usan los portaaviones de Estados Unidos.
Actualmente, India ya tiene un portaaviones en servicio, el INS Vikramaditya, de segunda mano, comprado a Rusia, el mayor proveedor de equipos militares de la India, que espera poder adquirir un tercero en los próximos años. En la pasado, India había operado portaaviones adaptados a partir de antiguos buques de guerra de la Royal Navy británicos.
A finales 2021, la Indian Naval Ship (INS) encargó su décimo destructor, INS Visakhapatnuam, un buque de guerra de 7.500 toneladas que irá armado con baterías de misiles tierra-tierra BrahMos y misiles supersónicos con precisión milimétrica y un alcance de 290 km. Un ejemplo más del avance de la Armada india en su intento de frenar la expansión de China en la región del Indo-Pacífico.