Otro desatino más…

Mauricio Sahui recibe de Rolando Zapata el espaldarazo para constituirse en candidato al gobierno del estado de Yucatán, siendo el segundo titular del ejecutivo estatal, en perjuicio de Pablo Gamboa Miner, émulo de Changoleón, que se dice, duró unos minutos como abanderado del tricolor, siendo Zapata Bello encargado de provocar que mudara de parecer el presidente Peña Nieto.

Es de todos conocido el final de la historia: el candidato tricolor es derrotado por el actual titular del ejecutivo estatal y ello propicia que Mauricio Sahui salga del escenario político por un buen tiempo.

El ostracismo de Sahui concluye cuando es sorprendido en una reunión con militantes de MORENA a la que acude, el señor de las ligas, René Bejarano. Ante la multitud de reproches de la militancia tricolor, Sahui respondió que ignoraba que se trataba de una reunión de tintes partidistas y que acudió a invitación de un amigo.

Pudimos enterarnos en días pasados, que Mauricio Sahui (quien cumplió años el 8 de febrero) de manera personal se ha dedicado a invitar a militantes del tricolor, a festejar su onomástico (sin importar que ya haya pasado).

Sahui ha organizado el jolgorio en la Quinta Yu’um Beh, ubicada en la calle 28 Lote 6 por 1 y 3, de la colonia Santa Rosa, en Kanasín, Yucatán, este sábado 26 de febrero, a partir de las dos de la tarde.

Sabemos que entre los invitados al festejo se encuentran muchos liderazgos y personalidades del tricolor. Será interesante saber quienes acuden y que es lo que se dice.

Resulta revelador enterarnos que a la pachanga acudirá Ariel Alfonso Manzanilla, conocido popularmente como «chaquis», flamante titular de la comisión de justicia partidaria del tricolor, que sustituyera a Carlos Pavón Flores, renunciado por su apego a Mocita Camino, pese a cobrar en el otrora invencible.

El festejo de Sahui, representa otro desatino más (amén del de Bejaranazo) cometido por el ex secretario de desarrollo social, del que las malas lenguas dicen pretende congraciarse con Marcelo Ebrard y representar los intereses del canciller en nuestra entidad.

Mal hace Sahui en organizar un festejo tumultuario en estos momentos, en los que la emergencia sanitaria por el coronavirus aún no ha sido desterrada. Es irresponsable poner en riesgo la salud de quienes asistan.

Mal también hace Sahui en invitar a los priistas a una pachanga, a sabiendas que los militantes de dicho partido, carecen muchos de empleo y pasan graves apuros pecuniarios, como para que alguien cometa la torpeza, de ponerse a contar dinero delante de los pobres, haciendo gala de su desahogo económico.

Peor hace Sahui en presumir que a la reunión acudirá el ex gobernador Rolando Zapata Bello, flamante secretario de Alianzas Políticas y Agenda Ciudadana del CEN del PRI, recientemente nombrado por obra y gracia de la voluntad soberana de Alejandro Moreno Cárdenas, el inefable Alito, presidente nacional de dicho partido y poseedor de las cejas mejor depiladas del país, porque nadie quiere pensar que en las alianzas que se realicen, pudiera haber mano negra.

Será interesante saber que se dice y quién va, reiteramos. Será interesante dilucidar si es Sahui quien pretende (mediante este escalón) ponerse a la altura de figuras como Jorge Carlos Ramírez Marín o Rolando Zapata Bello, mostrando músculo político ante Marcelo Ebrard, a pesar del persistente rumor de que el canciller tiene malas mañas.

También será interesante averiguar si es que Rolando asiste y de hacerlo, constatar si pretende hacer una jugada de fantasía políticamente hablando, intentando una carambola por varias bandas, que incluya a Mocita (que se dice que le rinde cuentas) y a Sahui.

Para concluir, será interesante dilucidar si Rolando nuevamente se empeña en hacer gobernador a Sahui y si pretende hacerlo por el PRI o por MORENA, o si como aseguran algunas lenguas de doble filo, quiere asegurarse de hacerlo descarrilar y enterrarlo de manera definitiva.

¿Permitirán nuevamente los militantes de MORENA la infiltración externa y que los (ex) priistas les impongan candidato?, ¿en serio serán tan ingenuos de creer que el presidente López Obrador es ajeno a esos enjuagues?

¿Será que un político como Mauricio Sahui que se supone tiene ya muchas horas de vuelo, olvide que un evento de esta naturaleza no puede tomarse en cuenta como muestra de fortaleza política y poder de convocatoria, habida cuenta de que en los tiempos que corren, nadie rechaza una invitación para comer y beber gratis?

Seguimos pendientes…