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El gobierno del estado mudo y paralizado ante la llegada del huracán Delta

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Se aproximan horas oscuras para Yucatán. Bajo los efectos aún de la tormenta tropical Gamma, en cuestión de horas sufriremos los embates del Huracán Delta, que podría llegar a adquirir categoría tres o cuatro inclusive, nos comentan.

De manera asombrosa, el gobierno del estado ha permanecido prácticamente impasible, limitándose a publicar algunos reportes a través de redes sociales, sin recurrir a la radio, ni a la televisión.

Sabemos que se reunió ya el Consejo Estatal de Protección Civil, pero hasta ahí. Extraoficialmente supimos que la voz cantante la llevaron soldados y marinos, sin embargo, el gobierno federal tampoco ha alzado la voz, como solía hacer, a través de CONAGUA.

El último reporte que dio protección civil estatal lo dio anoche a las 20:45 horas y a la zona de Mérida la tenía en alerta verde. A la fecha, ignoramos si aumentó el nivel de alerta y las previsiones a tomar.

A diferencia del vecino estado de Quintana Roo donde el gobernador ha llevado la conducción del seguimiento al meteoro, en Yucatán no ha sido así.

Mauricio Vila brilla por su ausencia y no ha instruido al área de Protección Civil para dar un seguimiento cercano y continuo al fenómeno, como si los huracanes siguieran horario de oficina.

En su ingenuidad y desconocimiento de la realidad de la entidad que gobierna, el oriundo de Toluca suponemos que piensa que todo yucateco cuenta con equipo de cómputo o teléfono inteligente y conexión a Internet para revisar las publicaciones en redes sociales.

Entretanto, el tiempo sigue pasando y los yucatecos y los meridanos ignoramos si debemos tomar precauciones como comprar agua, alimentos, cortar ramas, asegurar ventanas y todo porque el gobernador y su runfla de parásitos vuelven a exhibir un evidente desprecio por la suerte de nuestra entidad y sus habitantes.

El gobierno del estado que debía encabezar todas las acciones preventivas y proveer la información pertinente al efecto, sigue inmóvil y guardando un mutismo escalofriante, rechazando informar a la población a través de radio y televisión, seguramente para no gastar. Su actitud es absolutamente de desinterés y desprecio hacia lo que pueda ocurrir a los grupos y sectores más vulnerables y desprotegidos.

Señores funcionarios públicos, cumplan con su obligación de informar, no pretendan guardarse todos los recursos para la época de campaña. ¡Despierte Señor Gobernador que hay muchos pendientes!, ¡Es hora de ponerse a trabajar y si no pueden con el paquete, RENUNCIEN!

Seguimos pendientes…

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