El PAN en graves apuros


Viernes 16 de mayo de 2025
La inminente elección del presidente del comité municipal del PAN demuestra que la caballada está flaca, raquítica más bien.
El relevo de la inexistente presidencia de Roxana Morteo lleva a abrigar las peores expectativas para el blanquiazul meridano, habida cuenta que punto y aparte de las buenas intenciones, consideramos nadie tiene espolones suficientes para gallo.
Repasemos los tres personajes que a la fecha han alzado la mano:
1.- El siempre polémico Kirbey Herrera, una figura rodeada demasiado por el murmullo del escándalo y por amistades no muy recomendables, que lo han hecho involucrarse en incidentes de los que no ha sabido salir de manera muy airosa que se diga. Un perfil muy cuestionado por muchos motivos.
2.- Juan de Dios Colli Pinto, regidor en funciones y ex director del registro civil, del que se dice es la ficha por la que apuesta Roger Torres Peniche, coordinador de la bancada blanquiazul en el Congreso. Juan consideramos, es un muchacho correcto y bien educado, pero que por alguna razón no termina de caer bien en el panismo, señalándolo algunos como prepotente y engreído.
3.- El polifacético Fernando Tzab, conocido en el ámbito blanquiazul como el cochiloco, quien cuenta con nuestro afecto en lo particular, pero que admitimos como disperso, poco serio, no muy aplicado, por lo que no termina de dar el do de pecho y no ha sido capaz de reunir en torno a su causa, a todos aquellos descontentos con el quehacer de los grupos hegemónicos en la actualidad.
A ninguno de los antes mencionados queremos mal, pero reiteramos: a la fecha, nos parece que nadie de los tres tiene espolones para gallo y con cualquiera de los tres al frente, al partido le auguramos un porvenir muy negro.
Cabe mencionar que no entramos en el análisis de ningún otro aspirante más, porque pese a que se oyen nombres, hasta el día de hoy, nadie ha alzado la mano y dicho con seriedad que quiere y va.
Entre los nombres que corren como rumores suenan Nacho Gutiérrez, Chucho Pérez Ballote, Karla Salazar y alguno otro por ahí.
Un factor que definitivamente podría inclinar la balanza sería el apoyo evidente o tácito proveniente de palacio municipal. De hecho, corre el rumor que pudiera impulsarse desde ahí las aspiraciones de alguna fémina. Sin embargo, esto tampoco garantiza nada y si bien pudiera significar el triunfo electoral para la beneficiaria del espaldarazo, eso no cambia el tétrico porvenir que se avizora en lontananza para el blanquiazul.
Al momento, el Partido de Acción Nacional se contempla como una entidad dividida, fracturada, infestada por conflictos internos y con una severa carencia de cuadros, consecuencia de su pésima operación política y de su alejamiento de la ciudadanía, consecuencia del abandono de sus principios.
¿Existirá en el PAN meridano, en el PAN yucateco alguna figura con la estatura política, con la visión, con la calidad moral que le permita sumar, restañar heridas, concluir enconos y constituirse en bisagra y argamasa entre grupos?
De ello depende consideramos la viabilidad del proyecto panista y la posibilidad de que la joya de la corona pueda retenerse y refrendarse para la causa blanquiazul. De lo contrario, lo mejor será irse preparando para hacer maletas para una muy prolongada ausencia del poder.
Seguimos pendientes…
Dios, Patria y Libertad

