BlackRock acapara tierras de cultivo en Reino Unido
Jueves 28 de noviembre de 2024
Bill Gates, que ya es el mayor propietario privado de tierras agrícolas en Estados Unidos, ahora tiene la mira puesta en Gran Bretaña y se ha asociado con BlackRock para adquirir grandes extensiones de tierras agrícolas británicas.
BlackRock, el mayor gestor de activos del mundo, ha lanzado un fondo de cobertura destinado a comprar tierras agrícolas en toda Gran Bretaña, una medida que ha provocado un amplio debate sobre las implicaciones para la soberanía alimentaria, las comunidades rurales y la concentración de la propiedad de la tierra.
La estrategia, que refleja las amplias adquisiciones de tierras agrícolas estadounidenses de Gates, parece diseñada para consolidar el control sobre los recursos agrícolas y las cadenas de suministro en manos de unas pocas entidades globalistas poderosas.
El momento de estas adquisiciones también ha llamado la atención debido a las recientes visitas de Gates al número 10 de Downing Street y los paralelismos con las políticas del Partido Laborista, como la reforma del impuesto a la herencia profundamente impopular de Keir Starmer y Rachel Reeves.
Los críticos sostienen que estas políticas aprobadas por Gates exprimirán aún más a los pequeños agricultores y harán que sus tierras sean vulnerables a las compras por parte de gigantes corporativos como BlackRock y Gates.
Según los informes, BlackRock ha dado instrucciones a sus filiales para que eviten comprar granjas vendidas en subasta debido a que los propietarios no pagan sus deudas, posiblemente para eludir el escrutinio público de las ventas en dificultades.
BlackRock también ha reforzado sus inversiones en energía renovable en el Reino Unido, incluidos parques eólicos en Grimsby e instalaciones solares en Pembrokeshire, proyectos que, según se informa, abastecen a 1,8 millones de hogares británicos.
Sin embargo, esta agenda verde se alinea convenientemente con los recientes esfuerzos globalistas por adquirir tierras a gran escala, dejando a los agricultores independientes fuera de la industria, ya que las tierras agrícolas se utilizan como bienes raíces privilegiados para proyectos de energía renovable.
Si bien las cifras exactas sobre la cantidad de tierras agrícolas del Reino Unido que actualmente posee BlackRock siguen siendo opacas, su agresiva expansión en el sector agrícola se alinea con la agenda más amplia de la élite global para consolidar el control sobre el suministro de alimentos del mundo y las cadenas de suministro críticas
