El periodista Humberto Padgett denuncia que fue detenido ilegalmente por reclamar carpetazo a un expediente
Sábado 22 de junio de 2024
El periodista Humberto Padgett denunció que fue detenido por policías de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) y retenido en la Fiscalía de Servidores Públicos de la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México (FGJCDMX) por pedir explicaciones sobre el “carpetazo” que, acusó, ésta le dio a un expediente suyo que data de 2017.
De acuerdo con Artículo 19, el comunicador fue retenido en las Instalaciones de la Fiscalía al menos una hora, sin ser ni liberado ni movido en acorde a los procedimientos de detención.
En una serie de mensajes y videos en su cuenta de X, señaló como responsables de una venganza por su trabajo periodístico al jefe de gobierno, Martí Batres, y al presidente Andrés Manuel López Obrador y pidió asilo fuera de México a la Embajada de Estados Unidos en nuestro país.
Tras la denuncia, la organización internacional Artículo 19 emitió un comunicado en el que acusó que la Fiscalía que dirige el encargado de despacho, Ulises Lara, revictimizaba y retenía a Padgett y que su caso se mantenía en impunidad.
En su cuenta de X, la FGJ capitalina informó que se pidió la intervención de policías auxiliares para remitir al periodista ante un juez cívico, al conducirse con agresiones verbales y amenazas hacia un agente del Ministerio Público de la Fiscalía de Investigación de Delitos cometidos por Servidores Públicos.
A las 17:09 horas, el reportero colaborador de Grupo Imagen y del noticiero de Ciro Gómez Leyva informó que estaba “dejando” el “bote”.
La Consejería Jurídica, mediante la cuenta de X “Justicia Cívica”, confirmó que Padgett fue presentado en el Juzgado Cívico 8, en la alcaldía Cuauhtémoc, donde el juez declaró con base al certificado médico (emitido por el médico legista) el sobreseimiento del caso. El periodista no fue objeto de ninguna sanción.
La denuncia interpuesta por Padgett fue porque durante una cobertura e investigación periodística sobre narcomenudeo en las instalaciones de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), en la Ciudad de México, fue agredido físicamente, le robaron identificaciones y fue amenazado por sujetos desconocidos.
La denuncia que interpuso el periodista, en vez de ser debidamente atendida por las autoridades, fue desde un inicio minimizada por la FGJ capitalina, que calificó los crímenes sólo como robo y agresiones.
Tiempo después, las mismas autoridades filtraron a sus agresores, información delicada y personal sobre el análisis de riesgo del periodista y su familia, que incluyó direcciones, detalles del plan de protección otorgado en su momento por el Mecanismo de Protección a Personas Defensoras y Periodistas, así como datos personales adicionales.