El verdadero peligro de que ganara Claudia Sheinbaum
Lunes 18 de septiembre de 2023
Para muchos, lo malo de que ganara Claudia Sheinbaum las elecciones presidenciales, estriba en la continuidad de MORENA en el poder y en una presidenta que sería un clon de López Obrador.
Créanme, que francamente, eso es lo de menos, si bien es forzoso admitir que el panorama no es precisamente alentador.
Procedamos a explicar nuestros motivos para tal afirmación:
Si bien Andrés Manuel Lopez Obrador ha hecho un pésimo gobierno, con los peores resultados en todos los rubros de la administración pública, hay que decir que la figura de la Sheinbaum no nos hace abrigar esperanzas de algo mejor.
Por otro lado, es motivo de intranquilidad admitir que si bien López Obrador es un populista de tendencia autoritaria, Claudia Sheinbaum es una izquierdista consumada, formada en el marxismo más ortodoxo e intolerante.
No olvidemos que su primer esposo, Carlos Imaz fue uno de los más connotados porros universitarios, que imponían su ideario y visión, a través de la violencia.
Contemos con más actitudes estilo López Gatell y tipo Marx Arriaga si Claudia llega a ganar la presidencia.
Esperemos un incremento sensible en el número y presencia de asesores cubanos, venezolanos, nicaragüenses y chinos de ganar Claudia las elecciones.
No perdamos de vista que su probable vocero, Changoleón Fernández, en un inexplicable rapto de sinceridad, confesó que la prioridad de sus correligionarios, es promulgar una nueva carta magna.
Carta Magna que sería hecha a imagen, semejanza y conveniencia de todos los fanáticos de la Cuatro T y que por supuesto conculcaría todas las conquistas y libertades de la época de los partidarios del conservadurismo.
Un escenario así, es francamente aterrador y si nos acercaría peligrosamente a las circunstancias y condiciones de Cuba y Venezuela, lo que a muchos socialistas fanáticos quizá les encantaría, pero a la inmensa mayoría de mexicanos, no creemos les suceda.
Y si nos inquieta y preocupa un clima de confrontación social e institucional como el que hoy día prevalcece, eso sería un juego de niños, comparado con lo que pasaría con una cohorte de izquierdistas radicales enquistados en el poder.
De suerte tal, es que reiteramos que la oposición debiera tomar la pretensión de una constitución a modo, como bandera de campaña, cosa que pese al tiempo transcurrido tras la confesión Noroñista no ha sucedido.
Asimismo, semejante intención debe propiciar que la oposición ponga especial énfasis en la adecuada selección de candidatos para las elecciones legislativas, pues de ello depende amarrarle las manos a Claudia si llegara a ganar la presidencia.
Porque aunque MORENA ganase la presidencia con Claudia, si le limitamos su margen de maniobra y amarramos las manos desde el congreso, es prácticamente un hecho que ya no alcanzarían a refrendar el poder para un tercer periodo.
Pero no nos precipitemos y pongamos atención a lo que nos aguarda de manera inmediata. Y recemos porque suceda el milagro de que las dirigencias partidistas entiendan su nivel de responsabilidad y se comporten a la altura de ello.
Seguimos pendientes…
Dios, Patria y Libertad
