Un antiguo refrán español
Sábado 17 de diciembre de 2022
“Vinieron los sarracenos y nos molieron a palos, que Dios bendice a los malos, cuando son más que los buenos”.
Cuentan las crónicas de la Madre Patria, que el origen de este dicho popular se remonta al siglo XIV.
En el margen Norte de la ribera del Duero se asentaba una hilera de aldeas cristianas.
Cuando la cosa se ponía fea y los almorávides se aprestaban a cruzar el río para perpetrar sus saqueos, tropelías y razzias, los alcaldes de los poblados urgían a sus mozos a organizarse para plantar cara ante la inminente incursión.
Las refriegas las ganaba, generalmente, el bando más numeroso.
Por ello el citado dicho, pletórico de la ironía o de la fatalidad tan española que implica, venía a ser una arenga para espabilar a la peña.
Si los cristianos querían conservar haciendas, religión y costumbres, no les quedaba otra que renunciar a sus comodidades de granjeros para convertirse en soldados y presentar batalla a un enemigo implacable y cruel.
Si los aldeanos respondían con convicción, empuñando sus hoces y guadañas como espadas y enarbolando a su Virgen como bandera, el invasor árabe se retiraría, probablemente escaldado y con el alfanje entre las piernas.
Pero en caso contrario, si el miedo o la desidia achicaban el ánimo de los varones hispanos, presentándose a pie de campo poquitos de los convocados, los sarracenos seguro saldrían vencedores.
Y si bien el mundo es de Dios, el Señor a veces se pone juguetón y se lo alquila a los valientes (y en contrario sensu, se lo niega a los… ya saben).
Así que el origen de este peculiar refrán, es instar a todos los interesados en una causa, a participar en ella con vigor y esfuerzo, para asegurar el triunfo.
Cosa que en los tiempos que corren, es prudente recordar a todos los mexicanos, especialmente ante la aprobación del famoso plan B del loco de palacio.
Seguimos pendientes…
Dios, Patria y Libertad