Pese a la crisis vocacional en el mundo, la Fraternidad San Pío X ya tiene más de 700 sacerdotes
Tal y como lo deseaba monseñor Marcel Lefebvre, su misión original para la Fraternidad San Pío X (SSPX) continúa con “todas las obras necesarias para la formación de los sacerdotes”.Con las ordenaciones de verano en el hemisferio norte, la FSSPX cuenta actualmente con 707 miembros en su fraternidad sacerdotal. Durante los últimos 30 días, seis sacerdotes fueron ordenados en Estados Unidos, ocho en Suiza y tres en Alemania.
Durante estas mismas ceremonias, 10 seminaristas fueron ordenados al diaconado, uniéndose a otros dos diáconos que habían sido ordenados a principios de año en La Reja, Argentina. De acuerdo con la Divina Providencia, esto indica una docena más de ordenaciones al sacerdocio en el próximo año.
Una Sociedad Internacional de Sacerdotes
La cita completa de monseñor Lefebvre, parcialmente mencionada arriba, es: “[Las actividades de la Fraternidad] incluyen todas las obras necesarias para la formación de sacerdotes y todo aquello que esté relacionado, sin importar si los candidatos están destinados a ser miembros de la Fraternidad o no”.
Este mismo sentimiento, de trabajar por la Iglesia con toda alma de buena voluntad, fue repetido el verano pasado por el Superior General de la FSSPX, Don Davide Pagliarani:
“La Fraternidad San Pío X tiene el deber de ayudar a todas aquellas almas que se encuentran actualmente consternadas y desanimadas. Ante todo, tenemos el deber de ofrecerles, por los hechos mismos, la certeza de que la Misa Tridentina nunca podrá desaparecer de la faz de la tierra: es un signo de esperanza sumamente necesario. Además, cada uno de nosotros, sacerdote o fiel, debe tenderles una mano amiga, porque quien no tiene el deseo de compartir los bienes de que se beneficia se hace en realidad indigno de esos bienes. Sólo así amaremos verdaderamente a las almas y a la Iglesia”.
Es con este deseo de trabajar por el bien de la Iglesia Universal que reconocemos con gratitud la intervención que Nuestro Señor ha tenido en este tremendo crecimiento en los últimos 50 años. En efecto, según las mejores estimaciones disponibles, después de los jesuitas (14,500), franciscanos (8,500), benedictinos (3,400) y agustinos (1,800), la FSSPX sería la quinta congregación religiosa más grande de sacerdotes ordenados entre sus miembros profesos.
Incluyendo seminaristas, Hermanas y Hermanos profesos de la FSSPX, y otras 20 otras congregaciones religiosas afiliadas a la Fraternidad, el número de ordenados, profesos y religiosos que trabajan para la restauración total del sacerdocio católico y la Misa Tradicional supera con creces los 700.
¿Un motivo de celebración?
Pero no debemos conformarnos con este hito, ni envanecernos y pensar que se trata de una obra humana. Por muy rápido que crezca el movimiento tradicional, incluida la FSSPX y otros, todavía queda mucho trabajo por hacer. También es importante tener en cuenta el número de otras comunidades de mentalidad tradicional en todo el mundo: la Fraternidad San Pedro (341), el Instituto de Cristo Rey (80) y el Instituto del Buen Pastor (alrededor de 50).
Finalizaremos este artículo nuevamente con una cita del Superior General:
“Estas intenciones las confiamos a la Madre de los Dolores, a Ella le dirigimos nuestras oraciones, ya que nadie ha penetrado mejor que Ella el misterio del sacrificio de Nuestro Señor y de su victoria en la Cruz, por cuanto nadie ha estado tan íntimamente asociado como Ella a su sufrimiento y a su triunfo. En sus manos ha puesto Nuestro Señor toda la Iglesia; y por eso mismo, a Ella le ha sido confiado lo que la Iglesia tiene de más precioso: el testamento de Nuestro Señor, el santo sacrificio la Misa”.
Es con este deseo de trabajar por el bien de la Iglesia Universal que reconocemos con gratitud la intervención que Nuestro Señor ha tenido en este tremendo crecimiento en los últimos 50 años. En efecto, según las mejores estimaciones disponibles, después de los jesuitas (14,500), franciscanos (8,500), benedictinos (3,400) y agustinos (1,800), la FSSPX sería la quinta congregación religiosa más grande de sacerdotes ordenados entre sus miembros profesos.
Incluyendo seminaristas, Hermanas y Hermanos profesos de la FSSPX, y otras 20 otras congregaciones religiosas afiliadas a la Fraternidad, el número de ordenados, profesos y religiosos que trabajan para la restauración total del sacerdocio católico y la Misa Tradicional supera con creces los 700.
¿Un motivo de celebración?
Pero no debemos conformarnos con este hito, ni envanecernos y pensar que se trata de una obra humana. Por muy rápido que crezca el movimiento tradicional, incluida la FSSPX y otros, todavía queda mucho trabajo por hacer. También es importante tener en cuenta el número de otras comunidades de mentalidad tradicional en todo el mundo: la Fraternidad San Pedro (341), el Instituto de Cristo Rey (80) y el Instituto del Buen Pastor (alrededor de 50).
Finalizaremos este artículo nuevamente con una cita del Superior General:
“Estas intenciones las confiamos a la Madre de los Dolores, a Ella le dirigimos nuestras oraciones, ya que nadie ha penetrado mejor que Ella el misterio del sacrificio de Nuestro Señor y de su victoria en la Cruz, por cuanto nadie ha estado tan íntimamente asociado como Ella a su sufrimiento y a su triunfo. En sus manos ha puesto Nuestro Señor toda la Iglesia; y por eso mismo, a Ella le ha sido confiado lo que la Iglesia tiene de más precioso: el testamento de Nuestro Señor, el santo sacrificio de la Misa”.
Para disgusto de los afectos a misericordiar a los que se oponen y resisten a los disparates de los obispos que prescriben necesario oler a oveja, esto no hay quien lo pare.
Ni la excrecencia eclesial de Roche, que es por decir lo menos, repugnante.
¿Van a querer que estas acciones proliferen?
Ellos verán que hacer para intentar neutralizar semejante ejemplo.
De nuevo llega a la mente aquella desagradable experiencia que contó un sacerdote francés, por entonces recien ordenado y que referimos en alguna ocasión, cuando visitó a Francisco con otros homólogos suyos en Santa Marta y este les dijo que en la diócesis a la cual pertenecían, por existir muchas vocaciones, había un “problema de discernimiento”.
Pues la FSSPX/SSPX, los conservadores, a veces llamados lefebvristas, otras veces llamados lefebvrianos, han publicado y reseñado que en la actualidad cuentan con la increíble cantidad de 700 sacerdotes, lo que debe preocupar allá en las altas esferas, porque la proporción de sacerdotes para una fraternidad pequeñísima, si se compara con el tamaño de toda la Iglesia, es enorme.
Ya saben Ustedes cómo es la solución que los santamartinos tienen para esos seminarios, del tipo de uno en Paraguay (Ciudad del Este) o uno en Argentina (San Rafael), o uno francés que actualmente corre peligro de tener el mismo destino (Fréjus-Toulon), cuando consideran que en ellos existe ese tal “problema de discernimiento”: ¡ciérrese! notifíquese y cúmplase.