El Doctor Diablito, próximo integrante de la 4T
La traición se prepara al interior del panismo. Manuel Díaz, conocido como el Doctor Diablito, debido a un episodio de robo de energía eléctrica protagonizado por el galeno, será el próximo integrante del blanquiazul en defeccionar.
Como es de todos sabido en el ámbito político, Díaz Suárez está obsesionado por ser mínimo candidato a una diputación federal, si no es que a la alcaldía de Mérida, situación que quedó manifiesta desde el proceso electoral pasado, donde presionó con todo en círculos estatales y municipales, no pudiendo a pesar de ello, obtener nada.
Y como dijimos antes, el Doctor Diablito se quedó con las manos vacías y debió volver a atender su farmacia y su consultorio (supimos que también ahora cuenta con un bar y con un restaurante) debido a su incapacidad para negociar y a la soberbia que mostraba a sus interlocutores.
A nivel municipal sabemos que le fue ofrecida el área de salud, misma que rechazó por considerarla muy poca cosa para él y a nivel estatal pues simplemente no hubo nada.
Así que tragándose su coraje, el Doctor Diablito se batió en retirada, hacia el sector privado, en espera de alguna nueva oportunidad.
Pero como su modo de ser ya es del dominio público en el panismo, sus posibilidades eran iguales a cero. Así que Díaz Suárez se empezó a dejar arrullar por el canto de las sirenas de otros partidos, que le musitaban al oído, lo que quería escuchar.
Fue así que se dejó ver en el cumpleaños de Mauricio Sahui, a quien se vincula políticamente con René Bejarano, el señor de las ligas, un individuo que se hizo famoso, por un video que lo exhibía embolsándose fajos de billetes, supuestamente para apoyar la campaña de López Obrador.
Peor aún, de manera posterior, el Doctor Diablito se ha dejado ver en compañía del diputado federal por el Verde, Mario Peraza Ramírez, una verdadera alhaja sobre quien pesan acusaciones de despojo de bienes inmuebles y tráfico de terrenos.
No obstante, enceguecido y ávido de causar daño al partido que lo cobijó tras su salida del PRI, donde jamás pasó de ocupar posiciones de quinta categoría, al Doctor Diablito no le importa el desprestigio social, con tal de saciar sus ambiciones.
Lo malo para su causa, es que Díaz Suárez se quedó solo y sin equipo, pues todos sus colaboradores tomaron distancia de él, debido a que cuando había algún problema, el Doctor Diablito los abandonaba a su suerte y se desentendía de ellos.
Así que si los cuatreros piensan que Díaz Suárez va a propiciar una sangría de votos panistas, están radicalmente equivocados. El Doctor Diablito es un cadáver político no sólo en el PAN, sino en el ámbito político-electoral.
Muy pronto se hará oficial la defección del multicitado galeno, para pasar a las filas de cualquiera de los membretes de la 4T,donde correrá la misma suerte que Joaquín «La Piñata» Díaz Mena: ser despreciado por la chairiza por su extracción blanquiazul.
Lo malo para el Doctor Diablito es que la 4T va en caída libre, merced a la pésima gestión de gobierno realizada por Andrés Manuel López Obrador, que de pronto hasta en la cárcel acaba. De suerte tal, que al transfuga en ciernes, no le aguarda un futuro muy halagüeño.
Estos amigos de la Cuatro T son afectos a cambiar oro por espejitos, Manuel Díaz no vale nada, no representa nada en el panismo, no se llevará consigo ni diez votos, pero como dicen en el campo: el que es buey, hasta la coyunda lame.
Seguimos pendientes…
