CON PANTALLAS LED, SOFÁS DE LUJO Y GIMNASIO,AMUEBLÓ CLAUDIA SHEINBAUM SUS OFICINAS
Con una inversión de casi 25 millones, Claudia Sheinbaum arrancó su gestión en la Ciudad de México, equipando sus oficinas con objetos suntuosos: sofás de 66 mil pesos, sillas metálicas de 75 mil, microcomputadoras de 96 mil, pantallas led de 193 mil…
Claudia Sheinbaum durante uno de sus mensajes a la población. Foto: @Claudiashein.
Claudia Sheinbaum llegó al gobierno de la Ciudad de México con una política de austeridad similar a la del presidente Andrés Manuel López Obrador, pero eso no le impidió desembolsar casi 25 millones de pesos en amueblar su oficina en su primer año de gobierno.
Según el inventario de bienes de la Jefatura de Gobierno, con sede en el Antiguo Palacio del Ayuntamiento, entre abril y diciembre de 2019 se invirtió esa cantidad de recursos en comprar 307 sillas, 41 microcomputadoras, 15 sillones, 12 micrófonos, 10 literas, un gimnasio universal, entre otros enseres.
De los más de 500 objetos adquiridos a lo largo de ocho meses, el 70% fueron compras con factura, pero el resto son compras de muebles sin un comprobante de por medio, según la base de datos propia de la dependencia.
Las sillas de Sheinbaum resultaron ser no sólo numerosas, sino caras. Se compraron 180 sillas de metal con valores individuales entre los 64 mil y los 75 mil pesos; el resto –las menos– costaron 8 mil, 2 mil, 900 y 483 pesos.
Algo similar a lo que ocurrió con las microcomputadoras que adquirió, pues la mitad de ellas tuvieron como costo unitario de 96 mil 821 pesos, mientras que las más sencillas costaron entre 5 mil y 22 mil pesos.
Entre estos lujos también aparecen siete pantallas led con un precio unitario de 193 mil pesos, micrófonos de 94 mil pesos, sofás de 66 mil y un gimnasio universal de casi 11 mil pesos.
Todos estos objetos tienen un número identificador individual, según la información pública de la dependencia analizada y corresponden a 34 inventarios que levantó la administración de Sheinbaum en 2019.
SHEINBAUM LLEGÓ CON PLAN DE AUSTERIDAD
A días de haberse llevado a cabo las elecciones de 2018, apenas se le declaró jefa de Gobierno electa, Sheinbaum declaró que aplicaría el mismo plan de austeridad propuesto por López Obrador a nivel local.
“Sabemos lo que significa la austeridad republicana y la vamos a aplicar en el gobierno de la Ciudad de México”, declaró en una reunión donde acompañó a López Obrador, que en ese entonces era presidente electo.
Para el cierre de 2018, el pleno del Congreso de la Ciudad de México aprobó la nueva Ley de Austeridad, Transparencia en Remuneraciones, Prestaciones y Ejercicio de Recursos, en la que se determinó que, además de que nadie podía ganar más que el o la jefa de gobierno, los funcionarios debían apegarse a la transparencia, la rendición de cuentas y el combate a la corrupción.
A los 100 días de su gobierno, Sheinbaum aseguró que su gobierno ya había presentado grandes avances en materia de ahorro, pues –recalcó– redujo gastos por hasta 25 mil millones de pesos. Dijo haber cancelado contratos “innecesarios” para mantenimiento, disminuido costos por demoliciones y haber cerrado 16 programas sociales porque “se utilizaban en la compra de votos”.
Pese al planteamiento de reducir los gastos en la administración pública, el primer año de su gobierno, los gastos para nuevos bienes muebles llegaron a los 24 millones 922 mil pesos.
Inventario de algunas adquisiciones del Gobierno de la Ciudad de México
¿SOBRECOSTO O LUJO?
Una revisión de los precios en el mercado de objetos similares a los adquiridos por la Jefatura de Gobierno, muestra que los costos presentados como información pública no corresponden con la naturaleza de los bienes.
Por ejemplo, no se localizaron sillas metálicas con costos superiores a los 75 mil pesos, como las que declaró la dependencia. Apenas se hallaron juegos de sillas metálicas de lujo a precios inferiores a los 20 mil pesos. Tampoco se encontraron micrófonos de 94 mil pesos, los más caros no superan los 50 mil pesos.
Asimismo, en algunas tiendas de lujo fue posible encontrar sofás de más de 60 mil pesos, como los que adquirió la jefatura; lo mismo con las microcomputadoras: las de mejor calidad sí pueden llegar a costar casi 100 mil pesos.
De igual forma, las pantallas led de mayor tamaño corresponden al costo reportado por la administración de Sheinbaum. Por ejemplo, una pantalla interior de 117 pulgadas de 2.55 metros por 1.54 ronda los 185 mil pesos; una de seis metros cuadrados puede llegar a los 190 mil.
Sheinbaum también gastó en equipo electrónico, como baffles, mezcladoras, consolas, equipo de iluminación y teléfonos intersecretariales. En mobiliario, como escritorios de madera y de metal, gabinetes, mesas, archiveros y pizarrones; muebles para el hogar, como un par de hornos, refrigeradores, literas y hasta un gimnasio portátil.
Según la base de datos que publicó la misma dependencia, estos objetos fueron compras de la nueva administración.
Varios medios han solicitado la versión de la Jefatura de Gobierno, sin que hasta la fecha se haya dado respuesta.
Sheinbaum al recibir a Pietro Parolin en el Palacio del Ayuntamiento. Foto: Daniel Augusto / Cuartoscuro.com.
MANCERA YA HABÍA AMUEBLADO LA JEFATURA
Pese a que Sheinbaum invirtió casi 25 millones de pesos en amueblar la jefatura de gobierno, su gasto fue menor al del gobierno de Miguel Ángel Mancera, quien el último año de su gobierno registró el alta de 566 objetos valuados en 50 millones de pesos.
La mayoría de estos objetos son altas que “carecen de factura” (460) y el resto son transferencias o reclasificaciones, es decir, bienes muebles usados que llegaron a la Jefatura de Gobierno.
Así, el gobierno de Mancera le heredó a Sheinbaum 105 sillones con un valor conjunto de 26.9 millones de pesos, 64 sillas de metal valuadas en 4 millones de pesos, otras 50 sillas de 2.3 millones y 37 micrófonos de 2.2 millones de pesos.
Como herencia también hay mesas, televisores, bocinas, escritorios, consolas, equipo de sonido, archiveros, estantes, vitrinas, libreros, cajas fuertes, entre otros.
Según la información que colocó la dependencia en la Plataforma Nacional de Transparencia, no hubo altas contempladas de bienes comprados entre 2015 y 2017.
Asimismo, la administración de Sheinbaum no ha reportado la compra de nuevos bienes muebles ni en 2020 ni en lo que va de 2021.