Campeche frena el regreso a clases presenciales por aumento de contagios de coronavirus
En un caso paradigmático y que debería resultar aleccionador para las autoridades educativas del resto del país, Campeche, el primer estado que pasó a verde y retomó actividades en las aulas, tuvo que dar marcha atrás a su plan de reactivación, tras un alza de contagios y su retroceso al semáforo amarillo.
La Secretaría de Educación de Campeche informó que se suspenderían las clases presenciales en los 135 planteles que integran el Plan para la Reactivación Escalonada Mixta, debido al incremento de casos de COVID-19 en la entidad y a que esta retrocedió a semáforo amarillo.
El titular de la dependencia estatal, Ricardo Koh Cambranis, indicó a diversos medios de comunicación que los niños de esas escuelas rurales permanecerán en sus hogares y tomarán clases mediante los cuadernillos que ya les fueron entregados.
“Los servicios educativos funcionarán con herramientas a distancia. Se darán nuevamente las clases presenciales cuando el semáforo epidemiológico se encuentre de nuevo en verde, esto es con la finalidad de salvaguardar la seguridad de los estudiantes y del sector educativo en Campeche”, dijo el secretario.
La Secretaría de Salud federal informó el viernes que Campeche, Nayarit y Nuevo León pasarán a semáforo amarillo a partir del lunes 24 de mayo.
Dentro de la estrategia de la Secretaría de Educación Pública (SEP), se tiene contemplado que el regreso a clases presenciales será únicamente en semáforo epidemiológico verde y cuando los trabajadores del sector educativo ya tengan la vacuna contra COVID-19, a fin de salvaguardar la integridad de quienes conforman el Sistema Educativo Nacional.
La Secretaría de Educación de Nayarit informó que hace apenas unos días se confirmó el regreso a clases de 32 escuelas, entre primarias y telesecundarias, decisión que fue cancelada este sábado.
“El día de hoy, al ver que estamos en semáforo amarillo, se ha tomado la decisión en conjunto de no regresar a clases presenciales en estas 32 escuelas este lunes”, explicó la dependencia en un comunicado.
“No están las condiciones de salud todavía para regresar o regresar con seguridad a clases. Entonces, no es posible arriesgar la vida de los docentes o de los alumnos que van a regresar”, dijo el secretario de Salud de Nayarit, Raúl López, en conferencia de prensa.
El 4 de mayo, el regreso a clases en una de las 137 escuelas en las que se echó a andar el plan de reactivación en Campeche tuvo una corta duración: a dos semanas de que los estudiantes retornaran a sus salones, se detectó el caso de una docente positiva a COVID-19.
En similar orden de ideas, tampoco existen en Yucatán condiciones sanitarias, ni de infraestructura propicias para el retorno a clases, razón por la que se antoja que implementar dicha medida, es a todas luces inadecuado, ya que pone en riesgo la salud y las vidas tanto de los alumnos, como de los trabajadores de todo tipo al servicio de la educación.
Hacemos votos para que la prudencia y la sensatez quepan en las autoridades educativas de Yucatán y para que estas entiendan, que si el presidente López Obrador es un demente, nosotros los yucatecos debemos demostrar ecuanimidad y mesura.
Seguimos pendientes…