La vileza de MORENA
MORENA es una franquicia que Andrés Manuel López Obrador creó para cumplir sus ambiciones y propósitos. No es un partido político, es una secta de resentidos y oportunistas, que ven en la política la arena idónea para vindicar agravios reales o supuestos y sanar sus frustraciones y complejos.
Por eso el discurso de MORENA es el rencor y su prédica de acción, la confrontación social. Porque solamente a través del conflicto de clases, es como esta percha de sociópatas puede tener acceso al poder económico y político. En contrasentido, la concordia les impide lograr sus objetivos.
Desde hace tres años los mexicanos hemos sido testigos del divisionismo y la beligerancia promovidos desde la presidencia de la república, por el titular del ejecutivo federal. Los epítetos de fifis y conservadores, bien claro dejan lo anterior.
Pero también desde hace tres años los mexicanos hemos sido testigos de cómo, con el pretexto y el discurso de la austeridad, este gobierno ha dejado de cumplir con muchas de las obligaciones que le eran inherentes, principalmente en materia de salud e infraestructura.
No obstante, al llegar la época electoral, sin abdicar del discurso de austeridad, hemos visto como los gobiernos y dependencias emanados de MORENA, han aumentado de manera oportunista el gasto social, tratando de esta forma, de abonar a su causa, reforzando la imagen presidencial.
A despecho de lo anterior, los recursos se niegan para rubros tan esenciales como la salud (vacunación de médicos particulares) y mantenimiento de infraestructura (aeropuertos, carreteras, centrales de generación de energía, puentes, líneas férreas y del metro de la ciudad de México) y por ello, muchas voces se elevaron advirtiendo el riesgo que se corría.
Desgraciadamente las advertencias fueron desestimadas y la tragedia acaeció en la ciudad de México, en la línea 12 del Metro, en el tramo de Tláhuac, causando a la fecha, varios decesos.
A raíz de ello, el asunto ha quedado en boca de todo el país, que ha cuestionado severamente la austeridad. Por ello, al encontrar en una plaza ubicada al oriente de la ciudad a un candidato a legislador por MORENA, no pude evitar la tentación de comentar al respecto, indicando que se trata de una situación, que debía llevarlos a preocuparse.
El diputado morenista en ciernes, lo negó: «No pasa nada, ni hay de que preocuparse. El Presidente tiene a la gente en un puño y todo le creen. De México se está haciendo circular el rumor de que fue sabotaje de la derecha, para hacernos quedar mal y afectar la imagen presidencial y todos lo están creyendo. Con eso, los apoyos sociales y las vacunas, vamos a ganar».
Las palabras del aspirante a legislador por MORENA, dejan al descubierto toda la vileza de la que el partido granate es capaz, manejando a su conveniencia el discurso, para asegurarse la lealtad de las clases más necesitadas, en donde basan la fortaleza de sus aspiraciones.
Es preciso que el pueblo mexicano (y por consecuencia, el pueblo yucateco y el meridano también) se percaten de la forma en que son manipulados, para satisfacer las ambiciones y las ansias de poder, de un grupo que pretende perpetuarse al frente del gobierno y que no vacilará en utilizar la fuerza para deshacerse de quien no se allane a sus propósitos.
Este seis de junio al momento de votar, debemos tener muy presente que nadie da nada gratis y que todas aquellas baratijas que los ciudadanos recibimos como obsequio en época de campaña, terminamos pagándolas muy caras, concluido el proceso electoral.
Este seis de junio, en la soledad de la casilla, debemos reflexionar que los buenos gobiernos no temen pasar por el crisol electoral, porque los buenos resultados, se traducen en votos.
Para concluir, cabe preguntarle: ¿han bajado los precios?, ¿bajó la gasolina?, ¿disminuyó la delincuencia?, ¿se erradicó la corrupción?, ¿han metido a la cárcel a alguno de los más destacados miembros de los malos gobiernos de antaño?, ¿ya se vendió el avión?, ¿bajó de precio la luz?, ¿ha mejorado la atención médica, ha crecido el aforo en los hospitales, hay médicos y médicinas suficientes?, ¿ya le vacunaron a usted, a sus padres, a sus hijos?, ¿ya ganan más los maestros y los empleados públicos?
Si su respuesta a más de dos preguntas, fue negativa, ya sabe usted por quien NO DEBE Votar.
Ya sabe usted que votar por MORENA o por cualquiera de sus partidos paleros, es contribuir a que las cosas sigan mal en nuestro país y a que un demente, desequilibrado mental, siga dividiendo a nuestra nación y destruyendo lo que a tantos mexicanos valiosis llevó tantos años construir.
Reiteramos: NI UN SOLO VOTO A MORENA, PARTIDO DEL TRABAJO, PARTIDO VERDE ECOLOGISTA DE MÉXICO, PARTIDO FUERZA SOCIAL, PARTIDO ENCUENTRO SOLIDARIO Y REDES SOCIALES PROGRESISTAS. Son más de lo mismo y no garantizan progreso, ni oportunidades para nadie en nuestro país.
Este seis de junio es la última llamada, la última oportunidad que tenemos los ciudadanos de recuperar a nuestro país y rescatarlo de las manos de aquellos que promueven el odio, la división y la discordia social y que han causado tanta necesidad y muertes, debido a su ineptitud y su corrupción.
Seguimos pendientes…