¿Está Francisco en el Cielo?
Jueves 29 de mayo de 2025
Por Fray JesúsMary Missigbètò
¿Está Francisco en el Cielo? Personalmente, lo que sé con certeza es que, tras decirle pública y claramente la verdad sobre las herejías de su magisterio, en mi carta oficial del 1 de julio de 2022, fui amenazado de muerte, acosado y obligado a huir de Costa de Marfil para refugiarme en Benín…
¿Por qué se reanudaron la persecución y el acoso en Benín y se volvieron especialmente virulentos tras la carta abierta que dirigí al cardenal Víctor Manuel Fernández el 8 de octubre de 2023, oponiéndome a su nombramiento como cardenal e invitándolo a un debate público sobre los errores del magisterio de Francisco?
El 26 de octubre de 2023 y el 23 de septiembre de 2024, fui citado a dos juicios canónicos con el objetivo de mi destitución del estado clerical (gané estos juicios, ya que la fiscalía nunca pudo presentarme las pruebas de la acusación, es decir, mis palabras y acciones, que constituyen un delito canónico de desobediencia al falso magisterio de Francisco).
Fui víctima de dos envenenamientos con dinitrofenol (DNP) o un producto similar: mezclado con miel que compré a un comerciante que vino a vendérmela a casa y que consumí entre julio y diciembre de 2024.
Luego lo mezclé con aloe vera que compré a otro comerciante del pueblo y bebí del 20 al 28 de marzo de 2025.
Finalmente, contraje fiebre tifoidea a causa de una botella de jugo contaminado, comprada el 22 de abril cerca de mi casa (no me cabe duda de que este jugo estaba muy contaminado, ya que me provocó fiebres de 40 °C, y esta es la primera vez que contraigo esta enfermedad, lo que me obligó a cuidarme durante tres semanas, a pesar de haber recibido ya la vacuna contra la tifoidea tres veces).
Estas dos intoxicaciones y esta enfermedad afectaron gravemente mi salud y me hicieron perder 13 kg (de 70 a 57).
Gracias a Dios, ahora estoy mejor y me estoy recuperando poco a poco…
Si sigo vivo hoy, es gracias a Jesús y a María.
¡Muchas gracias, queridos amigos, por sus oraciones que me han acompañado durante estos meses de intoxicación y enfermedad!
Por favor, sigan rezando para que los obispos y el Vaticano me ayuden, comenzando con esta nueva carta que les escribí el 13 de mayo de 2025…
