Elvis y su anécdota con un borracho
Martes 7 de enero de 2025
En 1973, Elvis Presley había contratado a una Orquesta Sinfónica en Las Vegas para darle al público piezas clásicas de ópera, algo que no gustó en absoluto a sus fanáticos.
En uno de los conciertos un par de borrachos lo interrumpieron al gritar uno de ellos: «¡Elvis, eres un maldito traidor!».
Poco después, el borracho exclamó: «¿¡Qué pasa con el Rock And Roll, Elvis!?», a lo que Elvis respondió «Oiga, amigo, ¿cree usted que estamos sordos? Usted sabe que es de mala educación interrumpir a alguien cuando habla. Habrá mucho Rock And Roll en la segunda mitad de nuestro espectáculo… si para entonces usted no está durmiendo la mona».
El público estalló en carcajadas y aplaudió. Elvis entonces terminó de introducir su siguiente aria y la orquesta comenzó a tocar.
Antes de que Elvis pudiera unírseles, el borracho volvió a gritar: «¡Has vendido tu alma, Presley! ¡Has abandonado lo que te hizo grande!».
En ese momento tres robustos agentes de seguridad se acercaron al borracho, que ahora estaba de pie.
Los cuchicheos se diseminaron porque el público reconoció al personaje que profería esos gritos, era el mismísimo John Lennon.
Los gorilas asieron a Lennon por los codos, y éste le asestó un puñetazo en la mandíbula a uno de ellos.
Diez minutos después Lennon se encontraba aturdido en una celda de la comisaría, y Elvis apareció por allí para pagarle la fianza.