El Foro Económico Mundial quiere acabar con la Navidad
(La noticia tiene algunos meses) El Foro Económico Mundial (FEM) se ha posicionado en contra de las tradicionales celebraciones navideñas, argumentando la necesidad de combatir el cambio climático.
Este movimiento ha generado preocupaciones sobre un posible ataque a las tradiciones cristianas desde una organización tradicionalmente acusada por ser permeable a ideologías y grupos de presión alejadas de las raíces cristianas de Occidente.
El Foro Económico Mundial, conocido por su influencia en la política global y económica, ha hecho un llamamiento para cancelar o modificar drásticamente las festividades navideñas.
Según fuentes cercanas, la organización busca introducir políticas internacionales para reemplazar las tradiciones navideñas con celebraciones «neutrales en carbono», alegando preocupaciones medioambientales.
Este movimiento ha encontrado eco en algunos medios de comunicación, con CNN instando a sus espectadores el año pasado a cancelar la Navidad debido a la pandemia de Covid-19.
Este año, el enfoque se ha desplazado hacia el cambio climático.
The Guardian, otro medio alineado con estas ideas, ha criticado el intercambio de regalos y las comidas tradicionales, calificándolos de «vulgares» y proponiendo alternativas como el consumo de insectos y carne sintética.
La líder demócrata Katherine Clark, supuestamente alineada con el Foro Económico Mundial, ha sido señalada como una de las figuras en el Congreso de Estados Unidos que promueve esta agenda.
La iniciativa ha generado un debate intenso, con acusaciones de que el Foro Económico Mundial no solo busca influir en la política y economía, sino también redefinir la existencia humana y la vida en la Tierra.
Un informante del Foro Económico Mundial ha indicado que muchas políticas de la organización buscan «aplastar el alma humana», lo que se interpreta como un ataque directo a las creencias y tradiciones religiosas, en particular, el cristianismo.
La narrativa del Foro Económico Mundial, que incluye la idea de que «Jesús es una noticia falsa» y que «Dios está muerto», representa una confrontación directa con las creencias cristianas y es un organismo que hay que contemplar como enemigo de la libertad y de la religión.
El escritor mediático Yuval Noah Harari, asociado con el Foro Económico Mundial, ha expresado ideas que algunos interpretan como una blasfemia directa, sugiriendo que el FEM está adquiriendo «poderes divinos».
Esta retórica ha alarmado a muchos, quienes ven en ella un intento de reemplazar las tradiciones religiosas con una «nueva religión mundial» centrada en la supuesta ciencia del clima y el tecnocomunismo.
Este enfrentamiento entre el Foro Económico Mundial y las tradiciones navideñas cristianas plantea preguntas profundas sobre la libertad religiosa y la preservación de las costumbres culturales.
Estas acciones son un ataque directo a las creencias y tradiciones que han definido sociedades durante siglos.