Bola cantada: ya sabemos como son

Viernes 20 de septiembre de 2024

El beneficio de la duda se otorga a aquellos que no sabemos a ciencia cierta como son; por ejemplo, a un equipo integrado por novatos o personajes poco conocidos, cuyo desempeño puede ir de lo ridículo a lo sublime.

Pero cuando ya se sabe para bien o para mal, como son los miembros de un conjunto o agrupación, el beneficio de la duda ya no aplica y lo que tenemos, es la certeza de lo por venir.

Tal es lo que podemos opinar del gabinete ampliado, al conocer algunos nombres de quienes lo integran. Al respecto, es menester puntualizar que solo mencionamos los casos más representativos, pero que son muchas más las figuras que nos hacen abrigar suspicacias y desasosiego.

Comencemos por la figura de Francisco Torres Rivas, futuro director de JAPAY. Consideramos que se ha puesto la Iglesia en manos de Lutero, que de manera consustancial a esta designación, se prevé que en la dependencia abunden los manejos poco aseados, la negligencia derivada de las aficiones del próximo titular y con ello, las fallas y cortes en el servicio, que a final de cuentas se traducirán en aumento de tarifas. ¿Apostamos?

Prosigamos con la designación de Jacinto Sosa Novelo en el INSEJUPY, que por el historial conflictivo y pródigo en escándalos del vallisoletano, llevan a sospechar qué tales sean los signos qué rijan su actuación.

Continuamos con Pablo Gamboa Miner, el más conocido nini de la política local, que llegó al cargo, para variar no por méritos propios, sino por los buenos oficios e influencia de su padre, que logró colocarlo para que no se sumiera en el más profundo ostracismo político.

Finalizamos con Felipe Cervera Hernández, que de manera inexplicable presidirá el Instituto de Vivienda del Estado, tema del que es evidente, que el menor de los Cervera Hernández no tiene ni la más remota idea.

Se teme que la inexperiencia e ignorancia del próximo titular del IVEY, deriven en un desorden tal, que los conflictos por tierras sean el pan nuestro de cada día y concluyan llevando la sangre al río.

No en balde, con certera precisión estos personajes han sido motejados por la sabiduría popular, como los cuatro jinetes del Apocalipsis, por la cantidad de estropicios qué se considera, serían susceptibles de causar.

La verdad, es que reiteramos, hay otros perfiles igual de preocupantes que los ya consignados con antelación, pero que merced a no ser tan publicitados o tan difundidos, no provocan tanta expectativa.

Hacemos votos porque el titular del ejecutivo estatal los tenga siempre a mecate corto para evitar desaguisados a futuro, que solo impactarán de manera negativa en la suerte de nuestra entidad y de todos nosotros.

Resulta inevitable recordar la célebre frase de la Tucita (María Victoria Llamas) en la inolvidable cinta de la época de oro, Los Tres Huastecos: si ya saben como soy, pa’ que me invitan… y en efecto, a los cuatro conocemos de sobra y harto sabemos de que pie cojean y por tanto, que se puede esperar de cada uno.

Así que no solicitemos el beneficio de la duda, en estos y otros casos, porque no aplica, chango viejo no aprende maroma nueva, reza el adagio procedente de la sabiduría popular y bien se dice que no hay refrán perdido.

Tiempo al tiempo y veremos cuanto tarda su desempeño en darnos la razón y en confirmar nuestras expectativas (bastante malas por cierto).

Seguimos pendientes…

Dios, Patria y Libertad