Opinión

Cuando veas las barbas de tu vecino cortar…

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Lunes 5 de agosto de 2024

Reza el antiguo refrán: cuando veas las barbas de tu vecino cortar, pon las tuyas a remojar. La expresión es frecuentemente aplicable para los acontecimientos de la vida política.

Sabemos que en Venezuela la cosa está que arde, debido al hartazgo de la población del sufrido país sudamericano, de los excesos cometidos por la dictadura que padece.

En el hermano país de la parte austral del continente, todo hace suponer que existe un gobierno electo democráticamente, pero no es así. Desde hace años, apoyado en las bayonetas, pervive un gobierno populista y autoritario.

De primera instancia, lo encabezaba Hugo Chávez. Al morir el zambo, lo sucedió en el poder Nicolás Maduro, aunque nunca se suspendió la persecución a los opositores y críticos.

Pero bien se dice que no hay mal que dure cien años, ni cuerpo que lo resista; debido al deterioro de la situación económica y a la mala actitud asumida contra la disidencia de parte de las autoridades, es que éstas enfrentan hoy día, una ola de revueltas que amenaza deponerlas.

Los mexicanos debiéramos vernos en ese espejo, o mejor dicho, MORENA debería hacerlo, porque es evidente que en nuestro país nadie quiere que las cosas se tensen al grado de la insurrección.

Pero para que tal cosa no suceda, las autoridades de MORENA deberían aflojar la presión con la que intentan asfixiar a sus adversarios y entender que ostentarse izquierdistas, teniendo como vecinos y socios a los norteamericanos, es no solo una equivocación, sino la más completa estupidez.

Pero como la sensatez y la mesura no son cualidades que adornen a López Obrador y sus corifeos, los ciudadanos vemos con angustia, como el panorama se complica día con día y esto empeorará al máximo, sobre todo si logra la presidencia Donald Trump.

Empero, lo mejor para MORENA sería entender, a ejemplo del RIP, que los excesos no contribuyen a la mejora de nada y que en los tiempos que corren, vale más jugar a la segura y no jugar a jalarle la cola al tigre, para no salir lastimado.

Hacemos votos para que por primera vez en la vida, la única neurona que tiene el presidente de nuestro país, funcione y tome la mejor determinación, no solo para sus intereses, sino para los de todos nosotros, los mexicanos. De no ser así, sobrarán motivos para arrepentirse.

Seguimos pendientes.

Dios, Patria y Libertad

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