Opinión

Jalife, la primera víctima

Spread the love

Viernes 8 de diciembre de 2023

Es preciso decir que los yucatecos que destacan como periodistas, no son gente de la que podamos sentirnos muy orgullosos.

Carlos Loret de Mola, rutilante estrella mediática, gracias a Televisa y Latinus, es un completo progre, favorable a las aberraciones que plantea la ideología de género y peor aún al aborto. Muchos lo creen en la trinchera adecuada pero no es así. Confiable precisamente no es, por su afición a los montajes y valiente por añadidura, menos.

El otro lucero que refulge en el firmamento mediático es Alfredo Jalife Rahme, individuo por los apellidos, de inequívoca ascendencia libanesa, lo que hace más increible su izquierdismo y que por la redondez de su testuz, no niega ser oriundo de estas lajas.

Jalife como puede fácilmente colegirse, no es santo de mi devoción. Es uno más de los prosélitos de la secta lopezobradorista, dispuesto a cualquier indignidad, en aras de complacer a su mesías, al que supone impoluto e íntegro.

No puede negarse que Jalife es un individuo culto, pero tampoco que su análisis es muy sesgado hacia la izquierda. Empero, tiene momentos de lucidez y en esos instantes, le ha dicho hasta la despedida a la paisana de los bacilos y a la que fuera secretaría de economía, Tatiana Clouthier.

Clouthier Carrillo, hija del prócer blanquiazul que debe estar revolcándose en la tumba, por la oprobiosa condición de tránsfuga de su descendiente y la escandalosa sumisión de su hija, lo demandó penalmente, porque Jalife en el ejercicio del análisis periodístico y de su libertad de expresión, consideró que la ex panista, estaba entregando los veneros de litio nacional a la rapacidad sin límites del capital privado, nacional o extranjero, sobre todo este último.

A partir de lo anterior, procedió legalmente ante un tribunal neoleonés, que sin duda presionado por el peso político de la demandante, libró una orden de aprehensión, que se ejecutó cabalmente, contra el periodista.

Merced a los hechos, solo cabe considerar dos posibilidades: o Jalife era certero en sus apreciaciones y decia la verdad, cosa que habría que agradecerle e impedir que hayan vivales que se enriquezcan indebidamente a la sombra de un cargo público y que además implica un atentado contra el patrimonio e interés nacionales;

O tendría que admitirse con base a los hechos y los resultados, que Jalife se equivocó y en aras de la responsabilidad periodística y la caballerosidad, tendría que ofrecer disculpas a la ex funcionaria, por el daño causado a su prestigio, debiendo rehabilitarla completamente ante la opinión pública.

A la fecha, lo considerado en este último supuesto, no ha acontecido y en mérito de ello, tenemos motivos para pensar que Jalife acertó en sus consideraciones y análisis.

Lo que nunca tendría que suceder, es precisamente lo que ocurre hoy por hoy, que se atenta flagrantemente contra la libertad de expresión, encarcelando a Jalife, haciéndolo reo de su discurrir en público.

Nunca antes en la patria, ni en los peores tiempos del priismo omnipotente y todopoderoso, se llegó a semejantes excesos, privando de la libertad a un periodista.

Los funcionarios de MORENA, han demostrado tener la piel muy delgada, no son capaces de soportar el vitriolo de la opinión pública y los efectos que ello conlleva, socialmente.

Se quejan de las burlas, protestan por los juicios. ¿Qué válvula de escape le queda entonces al pueblo, si es censurado y maniatado?, ¿tomar las armas?, ¿se busca acaso un pretexto para justificar la represión?

Jalife no nos simpatiza, no es santo de nuestra devoción, pero estamos obligados a defender su inalienable derecho a producirse abiertamente y sin cortapisas. Es un tema de solidaridad de cuerpo. Defendiéndolo a él, nos defendemos todos.

¿Que podemos esperar los mexicanos si la federación emula al mítico Saturno, devorando a sus hijos?, ¿Que destino nos aguarda a quienes nos negamos a ponernos de rodillas ante la cuarta transformación?:

¿El destierro?

¿La cárcel?

¿La tumba?

La persecución y ulterior encarcelamiento de Jalife, deja un muy peligroso precedente contra la libertad de expresión, que tememos sea un sendero que a muchos otros funcionarios morenistas, les resulte sencillo tomar y comiencen una verdadera cacería de brujas.

Un famoso ex gobernador yucateco, renombrado por su calidad de intelectual, Víctor Manzanilla Schaffer, declaró en una oportunidad, que era preferible tolerar los excesos en la libertad de expresión, antes que reprimir y censurar. Ojalá y esto le sirviera de guía a los funcionarios emanados de MORENA, para normar su criterio.

A riesgo de ser también demandados y encarcelados por la ex secretaria de estado, que indudablemente ha olvidado de manera muy conveniente lo referente al respeto a la eminente dignidad de la persona, consideramos que es gente que carece de ella y que si además de todo, es intolerante y rencorosa, anida en ella el germen de la maldad, que la hace horrenda como mujer y como funcionaria.

Nos preguntamos si lo ocurrido, es un globo sonda para medir como reaccionaría la opinión pública ante el eventual encarcelamiento de líderes de opinión opositores. No olvidemos que Tatiana es la vocera de la candidata presidencial.

Lo peor de todo, es que no he sabido que los más importantes referentes en la opinión pública hayan dicho esta boca es mía. No he oído a los directamente interesados, a saber Ricardo Alemán, Carlos Loret, Brozo, Ciro Gómez Leyva, Alazraki y muchos otros, poner el grito en el cielo. No es un tema, subrayamos e insistimos, de simpatías o antipatías, sino de espíritu de cuerpo.

Reiteramos lo expresado en editoriales pasados y que malamente confirman los acontecimientos recientes acaecidos en México: viene lo peor, específicamente para aquellos que disentimos.

Empero, a pesar de ello, no vamos a dejar a nadie nuestra patria y su destino, sin antes combatir; y toda vez que humanamente no se avizora nadie capaz de marcar la diferencia, no nos queda más que hincar la rodilla en tierra y exclamar:

¡SANTA MARÍA DE GUADALUPE, SALVA A NUESTRA PATRIA Y PROTEGE NUESTRA FE!

Seguimos pendientes…

Dios, Patria y Libertad

Deja una respuesta