Moscú llama en la ONU a un cese al fuego entre Israel y Palestina
Domingo 15 de octubre de 2023
La propuesta de resolución presentada por Rusia ante el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas afirma que la solución a la crisis palestino-israelí se logrará exclusivamente a través de medios pacíficos, llamando al cese del fuego y condenando todo tipo de violencia, informó un diplomático del país euroasiático.
«[La resolución] es meramente humanitaria. Cese al fuego, condenar todos los actos de violencia y actos de terrorismo, garantizar la liberación de todos los rehenes, asistencia humanitaria irrestricta y evacuación segura de civiles», señaló el funcionario.
Más tarde, ya durante la sesión del Consejo, el embajador ruso ante las Naciones Unidas, Vasili Nebenzia, expresó su preocupación en cuanto a que la crisis palestino-israelí escale de forma regional y afecte a otros actores.
«La situación sobre el terreno es extremadamente preocupante y espantosa. La región está al borde de una guerra a gran escala y de una catástrofe humanitaria sin precedentes», declaró Nebenzia el 13 de octubre ante la comunidad internacional.
También señaló que las acciones israelíes «de castigo colectivo» a los residentes de la Franja Gaza, así como sus exigencias de evacuar a más de un millón de civiles en 24 horas y concentrarlos en un gueto de facto en el sur del enclave palestino, «son también inaceptables».
«Estamos dispuestos a la mediación, y tenemos capacidad para ello siempre que ambas partes estén interesadas. Pedimos un alto al fuego inmediato y que se evite una nueva escalada del conflicto», sostuvo Nebenzia.
En las primeras horas del 13 de octubre, las tropas de Israel realizaron sus primeras incursiones terrestres en Gaza, donde ya han muerto 1.900 personas, entre ellas 614 niños a causa de los ataques, según informes del Ministerio de Salud local.
La Organización de las Naciones Unidas (ONU) ha pedido al Gobierno encabezado por Benjamín Netanyahu que detenga la orden de desalojar en 24 horas a 1,1 millones de personas del norte de la Franja, debido a que el desplazamiento forzoso podría acarrear consecuencias humanitarias devastadoras.
Tel Aviv argumenta que la evacuación es por «la propia seguridad» del pueblo palestino, mientras que el organismo internacional se opone porque afirma que es prácticamente imposible mover a tanta gente en un período tan corto de tiempo.
