El hombre, cabeza de familia
Jueves 31 de agosto de 2023
Cristo es cabeza del Hombre, el Hombre es cabeza de la Mujer. Este es el orden divino que conduce al mayor florecimiento y felicidad de la familia y como resultado, de la sociedad.
Los hombres fueron creados para liderar, las mujeres fueron creadas para seguir. Pero para que un hombre pueda liderar, primero debe aprender a estar bajo autoridad.
Su autoridad no puede ser él mismo, eso lo convertiría en un tirano caprichoso: y los tiranos infligen gran daño a quienes están bajo su cuidado.
Su autoridad tampoco puede ser la cultura, eso lo convertiría en un títere tonto: su sistema moral será dictado por su entorno, seguirá lo que la mayoría sigue, una ola en un océano de necedad.
Un hombre, para aspirar a convertirse en gobernante benévolo de su casa, debe someterse al único Buen Rey y Señor justo de todos: el Dios que lo formó del polvo de la tierra.
Debe amar como Cristo amó, debe servir como Cristo sirvió, debe ser puro y santo como Cristo lo es, debe estar dispuesto a morir por Su esposa, como Cristo lo hizo.
Entonces, y sólo entonces, alcanzará el digno título de Hombre; hasta entonces, seguirá siendo un niño caprichoso que se sirve a sí mismo a expensas de otros.
Dios, Patria y Libertad