El mayor éxito de López Obrador: apoderarse del INE
Lunes 3 de abril de 2023
Andrés Manuel López Obrador puede estar orgulloso, consiguió su objetivo de atraer la atención de la oposición en pleno, con los señuelos que preparó al efecto: inicialmente la reforma electoral y posteriormente el llamado Plan B, que mostraron su eficiencia distrayendo una alianza contaminada con su negativa sistemática a toda propuesta presidencial, situación que le permitió operar con tranquilidad absoluta su verdadera estrategia: la infiltración del INE, a través de proponer allegados, que obtuvieran los cargos vacantes, siguiendo los procedimientos legales previstos legalmente, situación que los convertiría en irreprochables. Hace meses lo dijimos desde la tribuna de NOTIREDMÉRIDA, pero fue inútil, nadie nos tomó en serio.
Ahora, toda la oposición calla avergonzada, guardando significativo silencio, al comprender que cayeron en la trampa del presidente y fueron batidos en toda la línea.
Al más puro estilo priista, López Obrador saturó los órganos electorales con propuestas facciosas, intentando garantizar que quien llegase a los cargos, fuera un simpatizante, omiso o declarado.
La jugada le salió perfecta, a pesar de los patéticos intentos de algunos medios y comunicadores, incluidos el propio Loret de Mola, por hacernos creer que se debe dar a los funcionarios recién nombrados, el beneficio de la duda, confiando en su profesionalismo.
La realidad es que es puro atole con el dedo: la verdad monda y lironda es que se trata de simpatizantes de la 4T que harán lo que se les ordene desde palacio nacional.
Ya antes López Obrador admitió que se equivocó con sus propuestas de ministros de la Corte, pero esta vez no será así, toda vez que va de por medio la viabilidad y la continuidad de su régimen. Triple contra sencillo que serán figuras dóciles y sumisas a los dicterios presidenciales.
A muchos les resulta complicado aceptar que si MORENA tiene tal postura hegemónica, se debe a la ineptitud y la inoperancia de una oposición, que no solo no ha sabido estar a la altura de su responsabilidad histórica, sino que además en otras ocasiones, ha traicionado flagrantemente a la sociedad y a la ciudadanía.
Pero más alla de estas tristes disquisiciones, la realidad es que el palo esta dado y ya desde ahora, se puede anticipar el resultado de la futura contienda electoral.
Esto es justo lo que pretendía el presidente: guardar las formas y apariencias de legalidad, para poder validar una presunta victoria en un proceso cerrado, utilizando para ello, la institución más defendida y valorada por la oposición: el INE.
Con ello, podrá López Obrador llenarse la boca y regodearse con su triunfo, logrado y confirmado, para disgusto de los conservadores, con la bendición del INE.
De ahí la importancia de que López Obrador haya colocado una porrista de la 4T, a la cabeza del tan defenestrado enemigo.
Dios, Patria y Libertad