Sociedad

La depresión

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Lunes 13 de marzo de 2023

– La depresión es real, pero no tiene por qué ser permanente.
– Las causas son multifactoriales y la solución rara vez es sencilla.
– Sin embargo, hay un factor común en la mayoría de los episodios depresivos: la pérdida de la esperanza.

Cuando pierdes la esperanza, pierdes todo impulso para seguir viviendo: simplemente existes.

Empero, si lo pierdes todo, más aun te aferras a la esperanza, mantienes tu instinto de supervivencia: seguirás luchando y creyendo por un mejor porvenir.

¿Qué puedes hacer para fortalecer tu sentido de esperanza? Aquí 3 directrices clave:

  1. Afronta tu propia debilidad.

Eres débil, eres incapaz, eres inconsistente, rompes tus promesas, le haces daño a quienes amas, hacer el bien requiere esfuerzo, hacer el mal te es fácil.

No te dejes embobar por el dulce veneno de la seudo-psicología de la promoción de la autoestima que te llena de ilusiones: «eres fuerte», «eres poderoso», «eres hermoso», «eres X, Y, Z»… inflando el ego.

Tales mensajes, podrán darte un ‘subidón de azúcar’ en el estado de ánimo por un momento, pero cuando los efectos desaparezcan, quedarás en un estado aún más miserable.

Los mitos y las ilusiones, nunca son soluciones permanentes. La seca verdad, aunque sea una píldora amarga, a la larga, como una buena medicina, sanará tu alma.

  1. Busca la reconciliación.

La esperanza es el resultado de un espíritu reconciliado. El alma no reconciliada, es un alma atormentada.

Aquellos a quienes has lastimado, ya sea intencional o inconscientemente, son gente a quienes has dañado de algún modo: ve y pide perdón.

Nunca es fácil, y siempre es humillante tener que pedir perdón, pero por el bien de tu alma, hazlo.

A aquellos que te han lastimado, causado dolor, te trataron injustamente y sin embargo sientes que se salieron con la suya: ¡Libéralos! No los retengas en tu corazón con resentimiento: recibe el perdón, pero también dispensa el perdón, gratuitamente y de corazón.

Verás, en el proceso, sin siquiera darte cuenta, que sanará tu alma y pronto un rayo de esperanza se infundirá a tu vida interior.

  1. Necesitas estructura, no caos.

¿Qué quiere decir esto? Bueno, ¿qué vemos a Dios haciendo desde el principio? No solo está creando, sino poniendo en orden un cosmos en caos.

Tu vida es caótica ahora mismo: tu mente corre en mil ángulos. Un día quieres algo, otro, desprecias eso mismo.

Por un momento, ríes a carcajadas, el siguiente estás ahogándote en lagrimas.

Ves las cosas a través de una espesa niebla, nadie te entiende, ni siquiera tú mismo.

¡¡Necesitas estructura!! Ahora, escucha y apaga el televisor: hay muchos sistemas de estructuración que los filósofos antiguos más reputados y los psicólogos modernos más respetados pueden ofrecer, pero ninguno se acercará a la estructura de tu Hacedor.

¿Quieres una base de vida inquebrantable, inmutable y segura? Abraza la ley de tu Creador.

Como el programador que escribió el software, Él te conoce mejor. Así que aquí está el Código.

Fuente:

– Ama a Dios sobre todas las cosas.
– Ama al prójimo como a ti mismo.

Ahí está: esa es la estructura maestra que sostiene el cosmos entero. Así que ve, vive en ella, día tras día.

No te traerá muchos amigos, especialmente en estos días tan caóticos, pero créeme:

Te apoderarás de la vida con la nueva esperanza encontrada, que nada, ni nadie, ni en esta vida, ni en la siguiente, podrá sacudir o arrebatarte.

Dios, Patria y Libertad

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