Salvador Sánchez le habría ganado a Chávez, afirma Juan Laporte quien peleó con ambos
Jueves 10 de noviembre de 2022
Juan Laporte tuvo la oportunidad de enfrentar a dos de los mejores boxeadores mexicanos de la historia, los compara y no lo duda: Salvador “Sal” Sánchez le ganaba a Julio César Chávez.
El 13 de diciembre de 1980 llegó su primera oportunidad de título mundial y fue ante Sal Sánchez, quien lo venció por decisión unánime en 15 asaltos.
Seis años después, el 12 de diciembre de 1986, retó a Julio César Chávez por el cetro superpluma del CMB y fue derrotado por la misma vía.
Yo me enfrenté a los dos y yo sé que Salvador Sánchez me pegó mucho más que Chávez”, dijo Laporte en entrevista con revistas especializadas. “Es más rápido para mí, yo creo que Salvador Sánchez le ganaba Chávez”.
Para el puertorriqueño, ninguno de los pugilistas tenía un poder fulminante, pues necesitaban muchas combinaciones para alcanzar el nocaut.
“De la pegada yo voy a decir, para mí, Julio sí pegaba”, aseguró. “Pero Julio, para mí, tenía que meter muchas combinaciones para dar un solo golpe para un nocaut, pero también Salvador Sánchez igual”.
Pero dejó en claro que Sal Sánchez tenía cualidades que Chávez no, incluida la resistencia, la técnica y el alcance.
“Más técnico, más rápido, más alcance, Salvador Sánchez tenía todo eso”, añadió Laporte. “La diferencia es en el boxeo y la inteligencia. Chávez era para venir a pelear, pero Salvador Sánchez boxeaba, peleaba, era muy inteligente, la resistencia era muy buena”.
Para Laporte, Sal Sánchez le ganaba a Chávez
A diferencia de ambos peleadores mexicanos, aseveró que él sí era un peleador de un solo golpe si encontraba el correcto.
“Salvador Sánchez no era un boxeador de un solo golpe, yo sí”, indicó. “Si conectaba el golpe correcto ya no tenía que dar más combinaciones”.
La diferencia entre las peleas de Laporte con Sánchez y Chávez fue de seis años, pero el boricua aún lo recuerda y con Sal sí le fue mal.
“Cuando yo salí con Salvador Sánchez estaba así (hinchado de la cara)”, consideró. “Cuando salí con Chávez yo estaba bien, aquí en la nariz algo, me soplé la nariz y se me marcó un poco el ojo, eso fue todo”.
Lo que sí dejó en claro es que tuvo el privilegio de haber enfrentado a esos ídolos, “peleé con los dos mejores, con lo mejor”.