Hija del Puma muestra su deterioro físico: «Esta es la cara del whisky, el vodka, la cerveza… «
Liliana Rodríguez no tuvo reparo en publicar una imagen de la mujer que era hace un año. «Esta es la cara de: ‘Si mi propio padre no me quiere, ningún hombre me va a querer'».
Este año algunas estrellas han demostrado cómo el estar mal consigo mismo puede repercutir en tu aspecto físico y tu salud. No valorarse ni quererse por dentro, tiene sus consecuencias fuera.
Una de esas personas ha sido la cantante Liliana Rodríguez. Su testimonio, contado en primera persona, es un claro ejemplo de que abandonarse por todo lo sufrido puede perjudicar seriamente tu bienestar.
Aunque su estado de obesidad e inseguridad forma cada vez más parte del pasado, la hija de José Luis Rodríguez ‘el Puma’ ha querido recordar ese yo tan sufrido y maltratado que hoy en día ya no existe en su vida.
Han sido necesarios muchos años e incluso sustos para poder dejar atrás a esa mujer que se saboteaba por las malas experiencias personales vividas. Con esta imagen del dolor se despide de un pasado de todo menos feliz.
«¡El año pasado para la fecha! Siempre sonriendo…. ¡pero amargada infeliz! Hinchada y deforme. A punto de explotar. ESTA ES LA CARA DEL WHISKY, VODKA, CERVEZA Y LO QUE VENGA NO CONTROLADO, hartadas de comida junto a incontables cigarrillos», lee parte de su confesión.
La artista venezolana reconoció que no ayudó la mala relación con su padre, algo de lo que llegó a echarse la culpa. «Si mi propio padre no me quiere, ¡ningún hombre me va a querer!», explicó de su entonces sentimiento. «Tu papá te desprecia públicamente y tu esposo te abandona. De seguro ERES TÚ LA DEL PROBLEMA Y NO VALES», prosiguió.
Un testimonio lleno de coraje y valentía que a día de hoy reconoce sin máscaras ni miedo. Fue lo que vivió, sintió y sufrió, y así quiso compartirlo por si alguien de repente se siente identificado. Además, dejó claro que de aquello no queda nada. Es una mujer nueva física y sicológicamente.
«Este Día de Acción de Gracias será diferente mientras disfruto de mi recomienzo», explicó encantada y agradecida a sus amigos, familiares, médicos y, especialmente, Dios, por no haberla abandonado nunca.
«Busca tu felicidad y sé feliz», recomendó a sus seguidores. ¡Enhorabuena Liliana!