¡SALVEMOS LAS DOS VIDAS, A MONTEJO MAÑANA A LAS CINCO DE LA TARDE!

Con el acceso de MORENA al poder, la ideología de género tomó carta de naturalización en nuestras leyes y gobierno.

Desde tiempo atrás, los partidos políticos habían sido infiltrados por agentes de la destrucción del orden social establecido, pero en MORENA, dada su naturaleza de izquierda radical, es donde prevalecen.

Como en política imperan las conveniencias, los ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, se alinearon a la izquierda de inmediato, incluso quienes no fueron nombrados por López Obrador y cedieron a las pretensiones de la ideología de género y sus patrones.

Sorprendentemente, nadie alzó la voz. Todos vimos lo que venía y nadie hizo nada al respecto (o al menos fuimos muy pocos los que lo intentamos): ni la Iglesia Católica (infectada de populismo y liberalismo), ni las agrupaciones pro vida, ni sus líderes, ni los partidos, ni tampoco los políticos. Todos fingieron que no pasaba nada.

Hasta que sucedió. Los partidarios de la ideología de género, los aborteros presionaron y en un dos por tres consiguieron sus objetivos, protegidos y auspiciados desde las más altas esferas del gobierno (y con la complicidad de la Iglesia, recalco y reitero).

Hasta que de pronto, como que los católicos, los pro vida, la jerarquía eclesiástica hicieron como que se dieron cuenta y se sintieron en la obligación de hacer como que reaccionaban y como que se oponían.

Demasiado tarde. El palo está dado. La ideología de género es ley en México y el aborto se ha aprobado y se restringe la objeción de conciencia.

Entonces, ¿en NOTIREDMERIDA están locos?, ¿porqué apoyan una causa perdida?

No, no estamos locos. Apoyamos la causa pro vida por fe y por convicción y nos sentimos en la obligación de presentar batalla, aunque no esperamos triunfar a corto plazo, porque no hay condiciones propicias.

Empero, hay que luchar, en la lógica de que es preciso mover almas, despertar conciencias. Sabedores de que si luchamos, podemos perder, pero si no luchamos, estamos perdidos.

Por eso hacemos el llamado a la sociedad yucateca a manifestarnos, a hacernos presentes este domingo tres de octubre, a las cinco de la tarde, en Paseo de Montejo. Para dar testimonio de que Yucatán es pro vida, de que México es pro vida, de que somos muchos, de que somos mayoría y que debemos de hacer algo, para defender nuestros más sagrados valores y principios.

La vida es el derecho humano principal, el más importante, básico y fundamental, porque si no hay vida, nada tiene razón de ser.

Por eso debemos pensar en defender los derechos de la mujer que engendra, a vivir una existencia plena y del ser en gestación, a poder disfrutar de la oportunidad de vivir y acceder al goce de todos sus derechos. No hacerlo sería incoherente y perverso.

Los yucatecos, los mexicanos queremos vivir de acuerdo a nuestros valores y principios y debemos tener gobiernos que los garanticen y protejan y si no lo hacen, es nuestra obligación inconformarnos, desobedecer e incluso combatirlos y deponerlos.

Más allá de los reveses transitorios, es preciso no perder la fe y recordar que inevitablemente, tarde o temprano el bien y la justicia prevalecerán, con la ayuda de Dios.

Sea nuestro grito de batalla el mismo de San Miguel Arcángel, comandante en jefe de las milicias celestiales, teniendo a Dios de nuestro lado, nadie podrá nada en contra nuestra.

Nos vemos en Montejo, mañana a las cinco.

Seguimos pendientes…

Dios, Patria y Libertad